Un incendio forestal en Güeñes calcina nueve hectáreas
Se han formado dos focos perimetrados en una zona de difícil acceso para los servicios de emergencias
El incendio forestal declarado en Güeñes durante la madrugada de este viernes, a la altura del punto kilométrico número 12 de la carretera BI-3651, entre La Quadra y Zaramillo, ha sido completamente extinguido a primera hora de la tarde. Según informaron fuentes de la Diputación Foral de Bizkaia, finalmente ha calcinado alrededor de nueve hectáreas. Durante toda la jornada han estado trabajando en el lugar dotaciones de Bomberos de Bizkaia de los parques de Urioste y Zalla, junto a técnicos del Servicio de Montes y retenes de Basalan.
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Los bomberos han abandonado la zona afectada por las llamas en torno a las 17.00 horas. No obstante, en el lugar se ha mantenido un retén para rematar pequeños focos y reigniciones que se puedan desencadenar sin que haya un peligro real. A raíz del incendio no se han producido heridos ni daños materiales. Únicamente se han visto afectados 317 vecinos que no han tenido luz durante dos horas, ya que se ha tenido que cortar el suministro eléctrico por precaución. De la misma manera, la carretera BI-3651, entre La Quadra y Zaramillo, ha estado cortada hasta que los operarios han logrado sofocar el fuego.
El jefe de Servicio de Montes de la Diputación Foral de Bizkaia, Carlos Uriagereka, acompañado del responsable de la sección de protección e incendios forestales, Aitor Omar, y el jefe de Bomberos, Oscar Bascones, han comparecido ante los medios de comunicación para explicar los detalles del incendio y de su intervención.
Según explica fueron doce personas las que han compuesto el retén, bajo las instrucciones del técnico de guardia, y cuatro dotaciones de Bomberos con vehículos autobombas con líneas de agua. “Hemos trabajado de forma conjunta y podemos decir que la actuación ha sido efectiva”, señala.
Rachas de viento
Después de una mañana en la que las ráfagas de viento que hicieron ayer en el territorio, que dificultaron las labores de los bomberos, complicó la extinción. En este sentido, fuentes forales indicaron que de no ser por este fenómeno, el incendio estaría apagado desde el mediodía. “Se ha demandado el helicóptero de extinción pero, debido a la situación de las rachas de viento de intensidad y luego la red de líneas eléctricas que cruzan el espacio, que podía suponer un peligro, no se ha utilizado el medio aéreo para la extinción”, explica.
No obstante, la situación ha cambiado con la llegada de la lluvia. “La situación meteorológica también es favorable, porque nos da una ventana de oportunidad, y vamos a tener ya al atardecer un riesgo de lluvia, con lo cual eso va a ayudar”, puntualiza en el momento en el que compareció ante los medios de comunicación.
Paralelamente, se comenzaron a investigar las causas del incendio, haciendo un llamamiento a la prudencia “porque se deben de recabar todos los indicios y dar una causa que sea real. No podemos anticipar la causa, no tenemos una causa principal, se barajan varias posibilidades y vamos a trabajarlo en las próximas horas y días para poderlo determinar”, apostilla.
