Jon Rahm recibió ayer un mazazo al quedar fuera del corte del Dubai Desert Classic tras una segunda jornada aciaga. “Todo ha ido de mal en peor y no ha habido manera de enderezarlo. Ha sido frustrante”, lamentó tras firmar 77 golpes, cinco sobre par, la cuarta peor tarjeta de su carrera y la primera vez que no avanza al fin de semana desde hace más de tres años. “Pero que no cunda el pánico. Es mejor que esto pase en la primera semana que juego que no más adelante en el año. Acabamos de empezar”, añadió el barrikoztarra, que quiere sacar lo positivo que supone “adelantar el regreso a casa”, analizar los errores cometidos ayer, sobre todo desde el tee, y ponerse a trabajar con su entrenador para solucionarlos.

Las buenas sensaciones del primer día se empezaron a difuminar en el par 5 del hoyo 10, el primero de su recorrido de ayer en el Emirates Golf Club, ya que donde la víspera había hecho eagle tuvo que conformarse con el par. Pero el desastre comenzó en el 12. Su bola de salida acabó metida en un restrojo, sin posibilidad de encontrar una zona de contacto limpia. Rahm se la jugó y fue peor el remedio que la enfermedad ya que tuvo que dropar y acabó con un doble bogey. Cogiendo menos de un tercio de las calles, los problemas se sucedían en la mitad más sencillas, en teoría, del campo. En el 16 cayó otro bogey y en el 18 saltó todo por los aires con un doble bogey en un par 5 tras mandar dos bolas al agua.

“Que no cunda el pánico. Es mejor que esto pase en el primer torneo que no más adelante”

JON RAHM - Tras quedar fuera del corte

En el 1, cayó otro bogey y pasar ya el corte era ya una quimera, sobre todo el putt tampoco ayudó a restar golpes en aquellas escasas oportunidades que se dieron. Apenas un par de birdies alegraron su tarjeta sin posibilidad de arreglar un estropicio que dejó a Jon Rahm tocado, aunque persuadido de que podrá corregir los fallos: “En casa o en la cancha de prácticas todo parece más sencillo que a la hora de la competición”. El caso es que se le escapó en Dubái una buena oportunidad de sumar puntos para el ranking mundial y para la Ryder Cup y no tendrá tantas, lo que eleva la necesidad de brillar en los grandes. Ahora, Rahm tendrá tiempo de pulir su juego antes de afrontar el inicio del LIV Golf, previsto para la semana del 6 al 8 de febrero en Arabia Saudí.

El líder tras la segunda jornada del Dubai Desert Classic es el escocés Ewan Ferguson, con doce golpes bajo par. Tyrrel Hatton, compañero de Rahm en el Legión XIII del LIV, está en ocho bajo par y otros aspirantes a la Ryder como Rasmus Hojgaard, Thorbjorn Olesen, Tommy Fleetwood o Robert MacIntyre también tienen opciones de victoria, incluso Rory McIlroy, el defensor del título, con tres bajo par. Adrián Otaegui pasó el corte con el par del campo tras dos vueltas.