Volver a nacer. Es el título de la vida del vizcaíno Aketza Sánchez, un surfista nato al que la mar le puso la peor prueba con la que podía tropezar. Todo ocurrió un 28 de febrero de 2012, cuando este apasionado del mar se disponía, como cada día, a surfear en la playa de Plentzia. Un día tranquilo que disfrutaba junto a un gran amigo y una chica que estaba aprendiendo. En ese momento no había apenas olas, así que se acercó hacia la zona del pico y ayudó a la chica a ir a la orilla. Saltó, como lo llevaba haciendo toda la vida y se golpeó la cabeza con la arena. En ese momento su vida cambió, pero no se detuvo en ningún momento. Su amplio currículum así lo demuestra. 

Aketza formó parte de la primera edición del famoso reality de Telecinco, Supervivientes, donde llegó a ser finalista, profesor de surf, dos veces campeón de Europa de Kneeboard. Ahora centra sus esfuerzos en ayudar a otras personas a recuperar la movilidad en su asociación Goazen Up! y su afición por las olas le llevó a fundar la escuela y tienda de surf Cabobillano.  

Sus recuerdos de su paso por el reality de Supervivientes.

Sus recuerdos de su paso por el reality de Supervivientes. Cedidas

Un recorrido por su vida

 En el año 2000 Aketza decidió aventurarse, y nunca mejor dicho, a participar en la primera edición del programa Supervivientes. Tenía 24 años y toda la ilusión por vivir una experiencia única. Puso tola la piel en el asador y se metió a todos los telespectadores en el bolsillo lo que le llevó a ser finalista. Por aquel entonces era socorrista. El mar siempre ha estado presente en todas las etapas de su vida y su buena técnica le ha llevado a ser dos veces campón de Europa de Kneeboard. Doce años más tarde, lo que no sabía, es que su vida iba a dar un giro de 360 grados. Aketza sufrió una lesión medular que le impedía caminar en la que es su segunda casa. El momento del accidente no lo olvidará jamás. Estuvo varios minutos sumergido aguantando la respiración. No sentía su cuerpo y pensaba que todo se iba a detener en ese mismo instante. Pero hubo algo que le dijo: "Hay que salir adelante". Así logró salir a la superficie con la ayuda de un compañero. Este le colocó encima de la tabla para que los sanitarios pudieran desempeñar su labor. Colocarle correctamente fue imprescindible para su recuperación porque según Sánchez, el 80-90% de las personas que tienen accidentes de este tipo acaba teniendo una rotura entera de la médula cuando se le transporta. Pero no fue su caso. En helicóptero le trasladaron a la Unidad de Lesionados Medulares del Hospital de Cruces con pronóstico muy grave. Le ingresaron con una tetraplejia aguda. Fueron tres años de un largo proceso de rehabilitación tanto dentro como fuera del hospital, pero con mucho esfuerzo logró ponerse en pie. Los médicos que le trataron le apodan como el hombre milagro. 

Practicando paddle surf adaptado después de su lesión medular. Cedidas

Sus proyectos

Desde que esta lesión golpeara su vida, tanto su familia como el paddel surf han sido su refugio. Hace unos años creó, junto a su gran amigo Mikel Rotaetxe, Goazen Up!, una asociación sin ánimo de lucro que a día de hoy cuenta con más de 100 socios. Tal es su afán por el mar que nunca ha querido darle la espalda a pesar del accidente.

Limpiando la costa.

Limpiando la costa. Cedidas