Bilbao - No están siendo los Juegos de Imanol Rojo. A la agridulce actuación que tuvo en su debut en Pyeongchang el pasado domingo, cuando quedó en la posición 49 en la carrera de skiatlón, el tolosarra añadió un puesto 62 a su palmarés surcoreano. La prueba de los 15 kilómetros de ayer era su cita favorita en el calendario olímpico, pero Rojo fue incapaz de trasladar las ganas a la nieve y quedó rezagado demasiado pronto. “Cuando empiezas mal, generalmente acabas mal la carrera. Así que ha sido un día muy malo aunque en el material hemos acertado, pero se tiene que alinear todo para hacer un buen resultado y no ha sido el día”, destacó el esquiador alpino de Basque Team cuando finalizó la prueba. Y es que el tolosarra explicó que su mal resultado en skiatlón se debió sobre todo a una pésima elección del material, sin embargo, en esta ocasión la parte de logística no tuvo nada que ver. De hecho, Rojo achacó el puesto 62 al cansancio acumulado en su debut olímpico, ya que apenas tuvo cuatro días para preparar la segunda carrera: “Quizá sí sea falta de recuperación, pero también es que cuando las sensaciones no son buenas en un circuito así de duro, es muy difícil hacer buenos resultados”.
Con todo, el tolosarra reconoció que “ya piensa en la siguiente prueba”. Porque Rojo tendrá la oportunidad de desquitarse de este mal sabor de boca en la tercera competición de las cuatro que protagoniza: el sprint libre por equipos del próximo miércoles. Rojo sabe que debe descansar al máximo si no quiere agostarse tan rápido como ayer, aunque en esta ocasión a su lado estará Martí Vigo, su compañero de fatigas. El aragonés también está viviendo un aciago debut olímpico ya que no fue capaz de finalizar la prueba de ayer. Por ello, ambos esquiadores desean unir fuerzas para cuajar una buena actuación que les permita sonreír en estos Juegos. Y es que Rojo llegaba a la cita de Pyeongchang con el propósito de mejorar los discretos resultados de Sochi y “acabar alguna de las pruebas cerca de los 20 primeros”; pero de momento las cosas no le están saliendo del todo bien al tolosarra.
Tampoco fue la de ayer la última competición de Rojo en solitario. El esquiador alpino cerrará la actuación de la representación vasca el próximo sábado con la prueba de 50 kilómetros mass star, su última oportunidad para finalizar sus segundos Juegos con mejores sensaciones de las que ha tenido hasta el momento.
El podio Imanol Rojo cubrió la distancia de los 15 kilómetros en un tiempo de 37:35, muy lejos de los mejores. Y es que el suizo Dario Cologna se colgó la medalla de oro, la cuarta de su carrera, parando el cronómetro casi cuatro minutos antes que el tolosarra. El noruego Simen Hegstad cuajó una increíble actuación llevándose la plata a 18 segundos del líder, mientras que el ruso Denis Spitsov se subió al último escalón del podio.