Bilbao - Óscar Romero abandona definitivamente el Dakar. El piloto alavés no pudo terminar la especial debido a una rotura de la centralita de inyección de su Yamaha, sin embargo, mantuvo la esperanza de continuar debido a que la parte de la etapa que no pudo disputar quedó anulada. El langraiztarra viajó ayer hasta Salta por un camino alternativo para intentar que la organización le dejara continuar, pero recibió una negativa y tuvo que poner punto y final a su aventura en esta prueba. “Hemos ido hasta Salta para ver si nos dejaban seguir, pero no. Me faltaba muy poco, después de haber suspendido la etapa y las dos siguientes eran medio trámite, pero la carrera es así”, declaró Romero tras conocer la noticia.
Pero la noticia del día fue la suspensión de la etapa. El alud que sepultó el pueblo de Volcán, causando dos muertos, hizo que la organización suspendiera la especial entre Salta y Chilecito, considerada la más dura de todo el Dakar. La meteorología está siendo la protagonista de este Dakar. Marc Coma, nuevo director de deportivo de la carrera, prometió la edición más dura en el continente americano, pero lo que no esperaba es que el tiempo se convirtiera en uno de los factores decisivos. En la primera semana ya se tuvo que cancelar una etapa y ayer llegó el culmen con la desgracia sucedida en Volcán. Varios vehículos de asistencia quedaron varados sin poder llegar a Salta y muchos participantes debieron tomar un camino paralelo, de 200 kilómetros y para los que los pilotos necesitaron cinco horas. La organización decidió suspender la etapa y aprovechar la jornada para reagrupar la carrera de cara a una buena salida hoy en Chilecito. El director del Dakar, Etienne Lavigne reconoció que las condiciones climatológicas están siendo decisivas, pero recordó que en tierras africanas también ocurrían estas situaciones: “Cuando el rally se celebraba en África, también se cancelaban etapas debido a las condiciones meteorológicas”.
Esta situación es una de las más graves de la historia del Dakar. El caos es total y la incertidumbre se mantiene todavía en el aire. La organización es optimista de cara a la reanudación de la carrera, pero no puede asegurar al cien por cien que todos los vehículos de asistencia puedan llegar a tiempo a Chilecito para poder dar la última puesta a punto a los vehículos, muchos de ellos muy afectados después de la etapa maratón y tras un día de traslado sin que los recambios adecuados llegaran a la pista. Equipos importantes como Peugeot había conseguido desplazar algo de su asistencia por el camino alternativo con los todoterrenos, pero esta ruta paralela era demasiado estrecha y los grandes camiones, la mayoría con piezas importantes, se tuvieron que quedar a la espera de que abrieran la carretera de Volcán. Además, uno de los vehículos médicos también sufrió problemas al acudir a la zona del desastre a ayudar. El Tango 4x4 volcó y los dos facultativos que iban dentro de él quedaron atrapados, siendo necesario su rescate, aunque su vida no llegó a correr peligro.
Esta suspensión cambió completamente el panorama deportivo de la carrera. Uno de los más afectados fue Joan Barreda, que se encontraba en plena remontada y contaba con la especial de ayer para dar un importante paso adelante en la clasificación. “Supongo que será porque van a llegar todos muy tarde, pero no sé si la solución es cancelar la etapa. Creo que es una etapa importante para hacer y habría que buscar otra solución”, afirmó el piloto de Honda.