bilbao. Veteranía contra juventud. La final femenina de Wimbledon enfrentará a la estadounidense Serena Williams, 30 años, y a la polaca Agniezka Radwanska, de 23 años. En semifinales, Serena superó a la bielorrusa Victoria Azarenka, por 6-3 y 7-6, mientras que Radwanska derrotó a la alemana Angelique Kerber por 6-3 y 6-4.
La menor de las Williams, sexta cabeza de serie y que busca desempatar con su hermana Venus en el palmarés del torneo londinense, ya que ambas cuentan con cinco entorchados, se enfrentó a la número dos del mundo, Victoria Azarenka, a la que ya derrotó en la final del torneo de Madrid. En el primer set, Serena demostró que sigue manteniendo el nivel de antaño a pesar de las lesiones sufridas en 2011 y barrió de la pista a Azarenka. El segundo set fue más disputado, con ambas tenistas defendiendo su servicio al límite, provocando un tie-break que concluyó con la victoria de la tenista estadounidense.
Por otro lado, la polaca Agniezka Radwanska, número 3 del mundo, se enfrentó a la alemana Angelique Kerber, octava raqueta mundial. Fue un partido muy rápido, y buena prueba de ello es que el primer set solamente duró veinte minutos, para una duración total del envite de una hora y diez minutos. La primera manga cayó del lado de la polaca, que mantuvo su nivel de juego para certificar su pase por primera vez a una final de Grand Slam. Anteriormente había alcanzado los cuartos de final del Open de Australia en tres ocasiones y de Wimbledon, dos veces.
Los precedentes son favorables a Serena, ya que ha vencido en las dos ocasiones en las que ambas tenistas se han enfrentado: Los octavos de final del torneo de Berlín y los cuartos de final de Wimbledon, ambas en 2008.