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Otra victoria épica en Lasesarre

Mikel Macías anotó el gol del triunfo en los últimos cinco segundos de un duelo de infarto

Otra victoria épica en LasesarreFoto: Luis gómez

BARAKALDO: Llamazares, Portuondo (1), Porras (5), Sarasola (1), Rodríguez (5,2p), Oier (1) y Macías (4) -siete inicial; Urretxa, Borda (0),Piritz (0), Ortuondo (6), García (0), Muñoz (3).

BADAJOZ: Delgado, Candelela (3), Demovic (5), Milosevic (6), Hernández (5,2p), Pérez (0) y Filella (0) -siete inicial-; Sincich, Del Pozo (0), Gutiérrez (1), Ramos (5).

Parciales: 3-2, 6-5, 7-6, 9-8, 11-10, 11-13 (al descanso); 11-16, 16-19, 19-19, 22-21, 24-23 y 26-25.

Árbitros: Ausas y Florenza (Catalanes). Excluyeron con roja directa a Portuondo, Sarasola y Candeleda a falta de dos segundos, Sarasola, Porras, Macías, Demovic.

Incidencias: Unas 200 personas en Lasesarre. Se guardó un minuto de silencio por la muerte de Luis María Alcíbar exdirectivo del Trapagaran.

barakaldo. El Barakaldo Balonmano retorna a la senda de la victoria tras vencer con al Badajoz por un ajustado 26-25, gracias a un gol de Mikel Macías a falta de cuatro segundos. El conjunto auriazul, con sus piezas principales tocadas, recurrió a la heroica para llevarse una victoria en un choque que se le puso muy cuesta arriba al inicio de la segunda parte. El bloque fabril suma dieciséis puntos y mantiene la imbatibilidad de Lasesarre como oro en paño.

A los seis minutos de juego, Oier García se lesionó y comenzaron los problemas para los locales. Txanpi Rivero, sin profundidad de banquillo, recurrió a un renqueante Alberto Muñoz. Llamazares ponía su granito de arena en la portería (9 paradas) y Porras en el pivote (4 goles) y Joseba Rodríguez, con otras cuatro dianas, eran los puntales fabriles. Los pacenses mientras se mantenían a rebufo. Entonces, varios errores en el ataque baracaldés propiciaron que los visitantes empataran (10-10). El Badajoz se creció y al descanso se fue 11-13.

El partido se puso cuesta arriba en la reanudación (11-16). Rivero se la jugó dando entrada a Ortuondo, con rotura de fibras en el costado derecho e impuso una defensa 4-2. Ortuondo respondió con creces -6 goles- y el Barakaldo dio la voltereta (22-21, en el minuto 50). De este modo, los últimos diez minutos fueron no aptos para cardíacos. El Barakaldo dominaba, pero el desgaste y las lesiones pasaban factura. Demovic logró el empate a 25 a falta de 10 segundos. Y en la posterior jugada, Mikel Macías, que se fue por el extremo izquierdo, logró el gol a falta de cuatro segundos.