Todavía Directora del Instituto de las Mujeres dependiente del Ministerio español de Igualdad en manos del PSOE: Esta vez no ha sido uno de los llamados seudomedios del ultramonte quien le ha sacado los colores, sino una de las cabeceras del progrerío fetén al que usted pertenece. Cuenta el diario Público (es verdad que basándose en una información previa de El Español de Pedrojota) que la empresa de la que es cotitular junto a su pareja se ha hecho con un porrón de contratos (no menos de 64) para gestionar los llamados Puntos Violetas en diferentes localidades de toda la geografía hispanistaní. El pellizco comprobado asciende a 250.000 euros del ala, incluyendo contratos apañados cuando ya estaba en el cargo. Y anteayer, su conmilitón Sánchez, presentando no sé qué “por la regeneración democrática”. Hay que jorobarse. La igualdad hecha negocio.