Otra vez a votar. Sí. Y voy a ir, pero con la tremenda desilusión de que el sufragio universal, es decir, un hombre un voto , no se cumple. Veo que valen más los votos de la España vacía que los de Getxo, por ejemplo. Pero lo que me ha sorprendido es que si el sufragio hubiese sido directo contando solo los votos en bruto de toda la nación, fueran de donde fueran, como yo y otras y otros ciudadanos deseamos, el partido mayoritario, que ahora es el PSOE, o que sería otro en otra votación u ocasión, ya tendría directamente más, mucho más, que los 176 escaños necesarios y no habría los problemas para hacer ya un presupuesto social y urgente, y un Gobierno serio sin trampas. Así que deseo que cambie la ley electoral. Lo queremos muchos, casi todos.