Un tribunal ruso ha condenado a cuatro años y medio de cárcel a un exmarine estadounidense, Robert Gilman, acusado de atacar a un policía en la localidad de Vorónezh, en la zona sur de Rusia, tras ser detenido en enero en un tren que se dirigía a Moscú supuestamente por un altercado a bordo.

El juez ha considerado a Gilman "completamente culpable" de los abusos cometidos contra un miembro de las fuerzas de seguridad, a pesar de que el acusado alegó durante el juicio que estaba "inconsciente" cuando ocurrieron los hechos, según la agencia TASS.

El abogado defensor, Valeri Ivanikov, ha confirmado que recurrirá la pena para que esta sea "mucho menor" a la dictada este martes, equivalente a la petición de la Fiscalía. Además, se pondrá en contacto con las autoridades estadounidenses con el objetivo de "iniciar un proceso de canje", de tal manera que Gilman pueda regresar a su país a cambio de la entrega a Rusia de algún otro preso.