Innovación y nostalgia vuelven a fusionarse en un automóvil. Ahora lo hacen en el Renault 4 E-TECH. La recreación del popular y polivalente utilitario de los años sesenta repite la receta del moderno R5 para renacer convertido en un jovial multiusos eléctrico ligeramente mayor que el hermano.
Su estampa, claramente inspirada en los rasgos del modelo antecesor, aporta ligeras connotaciones SUV que, mientras no se hagan realidad las hipótesis de aire aventurero avanzadas, son solo un espejismo.
El R4 E-TECH sale a la calle para plantar cara a turismos y crossover compactos a pilas de alcance medio. Comparte la oferta motriz del R5, consistente en variantes con 120 y 150 CV, asociadas a baterías de 40 y 52 kWh respectivamente, que auguran autonomías de 308 y 409 km. Abren sus tarifas en 28.771 y 31.651 €, antes de aplicar las posibles subvenciones.
El diseño es la carta de presentación de este automóvil. Tras la afortunada reinterpretación del R5, el equipo creativo de la marca del rombo se vuelve a lucir al hacer vigente y creíble en pleno siglo XXI un diseño sesentero (el proyecto original del R4 arrancó en 1956).
Ese volatín retrofuturista deja algunos vestigios singulares en el Renault 4 E-TECH, un producto moderno y entrañablemente viejuno a la vez. El más llamativo es, por encima de la evocadora silueta, el semblante, adornado por la primera calandra luminosa monobloque del mundo.
Está confeccionada en una sola pieza transversal, compuesta por dos ópticas redondeadas cuyo contorno recuerda a la moldura cromada del antepasado.
El audaz descendiente contemporáneo es más grande y capaz. Tiene una longitud de 4,14 metros, 1,80 de anchura, 1,55 de altura y distancia entre ejes de 2,62 metros.
Es, por tanto, 20 cm más largo, 3 más ancho y 5 más alto que el R5 actual, al que saca también 8 cm de batalla. Se sitúa entre el Clio y el Captur. La peculiar silueta y la elevación de su plataforma 18 cm confieren al conjunto esa impronta crossover tan apreciada por el público.
Existe, además, una opción de techo corredizo de lona que, como en los orígenes del modelo, aporta un aspecto aún más desenfadado.
Pese a la compacidad de su hechura, el Renault 4 E-TECH consigue habilitar una cabina bastante amplia, con cinco plazas oficiales. El fabricante pone énfasis en la habitabilidad de la segunda fila de asientos, alegando que la holgura para las piernas (16,4 cm) es similar a la del Captur y destacando la notable altura libre hasta el techo (85,3 cm).
El modelo dispone de un cofre trasero de 420 litros (375 con el método VDA), un volumen superior al de la mayoría de rivales y cercano al que brinda el Megane.
La modularidad interior, gracias a la banqueta trasera abatible y la posibilidad de plegar hacia delante el respaldo del copiloto, permite embarcar bultos de hasta 2,2 metros de largo. La cabina ofrece, asimismo, 23,3 litros en huecos de almacenamiento, 9,2 en la segunda fila.
Un automóvil con identidad propia
"El Renault 4 E-TECH comparte un 68% de componentes con el R5, del que se distingue por su diseño singular, su mayor talla y una capacidad superior".
El peculiar estilo retro aporta identidad propia al modelo. La plataforma AmpR Small, destinada a eléctricos del segmento B, ha permitido aumentar la distancia entre ejes, elevar la distancia al suelo, ampliar el volumen de la carrocería y montar ruedas más grandes.
El interior mantiene la doble pantalla horizontal del R5: una instrumental digital de 10,1 pulgadas (7 en la versión de acceso) y una pantalla multimedia central de 10 pulgadas con sistema openR link con Google integrado.
El Renault 4 E-TECH está a la última en seguridad, con múltiples ayudas a la conducción: vigilancia de la atención del conductor, frenado automático de emergencia marcha atrás y de frente, alerta de salida segura, My Safety Switch y Active Driver Assist, que ofrece conducción autónoma de nivel 2.
Al igual que su hermano, el Renault 4 E-TECH es un eléctrico de onda media. Comparte una oferta motriz con dos niveles de rendimiento y dos rangos de autonomía. Está pensado para uso cotidiano urbano e interurbano, capaz también de viajes largos con planificación.
La versión inicial monta un motor de 90 kW (120 CV) con batería de 40 kWh, mientras que la superior ofrece 110 kW (150 CV) y batería de 52 kWh, con aceleración 0–100 km/h en 8,5 s y autonomía de 409 km.
El nuevo R4 se recarga en cargadores de 11 kW (3,5 h) o de corriente continua hasta 100 kW (del 10% al 80% en media hora).
Renault dice que ha concebido el 4 E-TECH 100% eléctrico “para todos los usos”. Lo equipa con el sistema de tracción Extended Grip, asociado a neumáticos todo clima y con modos ‘Snow’ y ‘All-terrain’, que optimizan la tracción y motricidad según la adherencia del terreno.
