LA transición energética hacia la descarbonización se ha convertido en un mantra que los fabricantes, y todos los políticos del ramo, invocan constantemente. A la hora de la verdad, esas buenas intenciones sirven para ponerse medallas, pero no siempre se traducen en hechos. Mientras unos anuncian a los cuatro vientos ambiciosos proyectos de movilidad eléctrica, otros simplemente los llevan a cabo. Es el caso de Kia, cuya última generación del Niro da una lección de cómo evolucionar hacia la sostenibilidad. La firma surcoreana reconsidera a fondo su crossover de talla media, para conferirle atractivo y perspectiva de futuro: recibe únicamente motorizaciones electrificadas (híbrida, híbrida enchufable y 100% a batería). Hay un Niro desde 30.200 euros, que se pueden quedar en 24.400 sumando descuentos y promociones por financiar.  

El recién llegado a los concesionarios es un automóvil completamente rediseñado y con un fuerte impulso tecnológico. Pretende convertirse en la referencia de la categoría CUV (Crossover Urban Vehicle), objetivo factible teniendo en cuenta su combinación de grata imagen, esmerada puesta en escena y tecnología de vanguardia. En su primera comparecencia en el mercado (2017) el Niro ya fue pionero en la electrificación al renunciar a motores exclusivamente de combustión.

La segunda entrega se involucra aún más en esa apuesta por la movilidad sostenible, sintonizando con un sector emergente de clientela cada vez más exigente e implicado en conductas respetuosas con el medioambiente. Nace así este nuevo Niro, que revoluciona su imagen, sofistica materiales y acabados, y refuerza aún más el capítulo de la seguridad. Kia aplica un estilo singular e innovador, para esculpir un automóvil esbelto, cómodo y funcional a un tiempo. Consigue así distinguirse en un segmento del mercado que tiende a la saturación e incurre a veces en la monotonía.

Se trataba de concebir y construir un CUV atractivo y versátil, pero también fiable, austero y eficiente. Así que la gama motriz tenía que ser coherente con ese propósito. En consecuencia, incluye tres modalidades de impulsión electrificada. El Niro propone una versión híbrida HEV, otra enchufable PHEV y una tercera exclusivamente eléctrica a batería BEV. Las dos primeras opciones, HEV y PHEV, recurren al eficiente propulsor de gasolina Smartstream GDi 1.6 de la marca, apoyado por sendos bloques a pilas. Por su parte, el Niro BEV ofrece ventajas medioambientales y también prácticas, dado que anuncia una autonomía de 463 km (WLTP) sin emisiones contaminantes. 

La nueva concepción altera la silueta del Niro, que es algo más grande, capaz y ligero que su antecesor. Añade unos milímetros a todas las cotas de su carrocería de cinco puertas, por lo que ocupa 4,42 metros de largo, 1,82 de ancho y 1,57 de alto; su distancia entre ejes llega a 2,72 m. Aprovecha el salto generacional para librarse de unos cien kilos y estilizar su figura; rebaja así su coeficiente aerodinámico, atenuando la resistencia del aire al avance y favoreciendo con ello la eficiencia energética. 

La carrocería actual procura cinco plazas razonablemente holgadas y un cuidado puesto de conducción provisto de instrumentación digitalizada. A espaldas del habitáculo alberga un hueco de carga, que brinda un máximo de 475 litros en la versión 100% eléctrica (su vano delantero cuenta con otro de 20), capacidad superior a la media de sus competidores. Las versiones HEV y PHEV brindan 451 y 343 litros, respectivamente. Dicho volumen se puede ampliar abatiendo completamente los asientos posteriores, operación que depara 1.445 litros en el HEV, 1.342 en el PHEV y 1.392 en el BEV 100% eléctrico.

La plataforma del Niro ha sido concebida para permitir distintas opciones de montaje de la batería, en función de la cadena cinemática empleada. En el caso de las versiones híbridas HEV y PHEV va instalada bajo el asiento posterior; el acumulador de la versión BEV es mayor y ocupa el piso entre los ejes. Cada configuración garantiza una distribución idónea del peso para conferir una estabilidad que optimice el comportamiento dinámico del vehículo. 

TECNOLOGÍA 

PRECISIÓN y SEGURIDAD

ADAS. Kia dota al Niro de avanzados sistemas de ayuda a la conducción para garantizar un avance preciso y seguro. La lista es extensa: asistente para evitar colisiones frontales y en el ángulo ciego, función de giro en cruces, cámara frontal, asistente de mantenimiento en el carril, de luces de carretera, control de crucero inteligente basado en la navegación, monitor de visión trasera, asistente para prevenir colisiones con tráfico trasero cruzado… También hay ayudas que facilitan aparcar y salir del vehículo. El asistente inteligente para aparcamiento remoto permite al Niro estacionar de forma autónoma, bajo supervisión humana, moviéndose en línea recta hacia delante o hacia atrás monitorizado por cámaras de visión panorámica y sensores ultrasónicos.