O Froilán persigue la polémica o la polémica persigue a Froilán, pero el caso es que el hijo mayor de la infanta Elena y Jaime de Marichalar suele estar asociado a escándalos, travesuras, incumplimientos de la ley, desplantes o disparos (propios y ajenos). El pasado fin de semana se vio en medio de un tiroteo con cinco heridos en una discoteca de Marbella en la que celebraba su cumpleaños y en la que se protegió escondiéndose tras un sofá.

Después de un suceso tan llamativo, los periodistas querían conocer cómo se encuentra y este viernes lo han abordado cuando salía de su casa cargando con una maleta, con lo que todo hace indicar que se marchaba (otra vez) de vacaciones, directo hacia un coche de alta gama en el que se ha sentado en el asiento del copiloto.

Felipe Juan Froilán de Todos los Santos, muy en la línea de su hermana, Victoria Federica, se ha mostrado disgustado y esquivo al encontrarse con los periodistas, a los que no quería responder. “Nada, nada, nada, ya está, ya está, eran sus únicas palabras ante las educadas palabras de una reportera. "Venga chao, un besito. Estoy muy bien, vivito y coleando. Chao, venga, un besito”, añadía, intentando cortar la comunicación.

En ese momento la periodista le dice que su hermana, Victoria Federica, que ha sido portada de la revista ¡Hola! montando a caballo, está muy guapa y le pregunta por su faceta de modelo, y ahí ya Froilán se enfada. “Bueno, ya vale, ¿no? Ya te vale”, le espeta a la reportera empeorando sus formas, para despedirse (sin responder, claro), con un “venga, adiós”.