EN una ubicación privilegiada para disfrutar de la buena mesa en verano, como es el puerto de Lekeitio, el Asador Prim es un referente de la cocina a la brasa, que potencia el sabor de carnes y pescados.

Para comprobarlo, nada como probar su especialidad, el rodaballo, rey de la demanda a la parrilla, aunque le siguen de cerca en el camino de la brasa el besugo, la lubina, el lenguado... Con mención destacada a los chipirones, recién sacados del mar en su momento óptimo.

En verano trabajan a la carta y sus platos pueden degustarse en su cotizada terraza en pleno muelle. En un marco marinero por excelencia acoge hasta 20 comensales. No obstante, dentro dispone de un comedor para 30 pax.

Entre las carnes, la chuleta de ganado mayor a la brasa se lleva la palma. Y el broche de oro lo ponen los postres caseros.

La bodega de Prim Erretegia es extensa, con vinos de distintas D. O. entre los que guardan un espacio de honor al txakoli vizcaino y guipuzcoano. Así, el comensal podrá armonizar cada plato al gusto.

Con tales ingredientes, siguiendo la línea de la cocina tradicional vasca, y apostando por el producto de cercanía, como los pimientos verdes y el tomate de huerta, logran que quien prueba, repita.

Abierto todo el año, salvo en noviembre, cuando cierran por vacaciones, y los miércoles, para descanso del personal, allí esperan para dar amplia respuesta al paladar desde que abrieron sus puertas hace siete años.

Estos días festivos en el municipio costero de Lekeitio son perfectos para celebraciones con la gastronomía como punto de encuentro. En familia o con amigos, la mesa está servida.