LA comida de influencia de Oriente Medio (Marruecos, Palestina, Jordania, Turquía y Líbano) gusta en Bilbao, según refleja el comedor de Jazmino’s, un espacio minimalista que conquista al paladar con una escueta carta –8 entrantes, 10 pitas y 6 postres– en la que prima la máxima del “todo hecho en casa”.
La filosofía del establecimiento busca recuperar la comida más típica de los citados lugares, ahondando en el origen de la cocina mediterránea y fiel al concepto de compartir platos. Así, se puede comenzar con unos entrantes fríos para untar (hummus, labneh, baba ganoush...) y seguir con falafel y unos pintxos morunos, para pedir después sawarmas (libanés, de berenjena o de pollo) y pitas individuales, por ejemplo. Entre ellas, la que llaman El Cordero de Dios tiene gran demanda.
Elaboran también kebab de cordero a base de carne macerada cortada a cuchillo, cebolla roja y pepinos encurtidos más tomate y pollo especiado.
Y por último, se remata la faena culinaria con un postre como el baklava, turrón árabe, tiramisú de cardamomo, brownie de sésamo y helado de pistacho o sus peculiares trufas con curry, aceite y sal.
Buscando “cerrar el círculo”, el pan, los marinados... son de elaboración propia e incluso la miel es de casa.
Acompañan sus platos con vinos 100% naturales, alguno catalán de la bodega familiar, sin aditivos añadidos ni en viña ni en botella. Simplemente es zumo de uva fermentada para beber. Tienen txakoli y algún caldo francés. En el vino, como en la carne, son defensores del producto en crudo, huyendo de lo industrial.
En estas fechas, en plena temporada de calçots, los domingos de febrero y marzo el espacio está transformando su cocina para quienes deseen probar este producto catalán. Sin olvidar todo lo que tiene que ver con el carbón. De hecho, “con las manos y al carbón” son las bases de sus elaboraciones.
Jazmino’s
Fernández del Campo, 17. Bilbao. Tfno.: 946 57 02 89