El Santurtzi no se da por rendido. El conjunto morado, subcampeón en la pasada edición de la División Honor vizcaina y vencedor del triangular que enfrentó a los segundos clasificados de las Territoriales de la Comunidad Autónoma Vasca, reclama una plaza para competir la próxima campaña en el grupo IV de Tercera RFEF porque, según estima, se lo ha ganado por méritos deportivos y, en cambio, se prima a dos de los tres equipos, Touring y San Ignacio, que perdieron la categoría por resultados deportivos. Ante ello, el club marinero elevó un recurso ante el Juez Único del Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol, que el lunes falló en contra y mantiene en Tercera RFEF al equipo guipuzcoano y al alavés. Así y todo, el Santurtzi volverá a presentar alegaciones ante Apelación, aunque apenas alberga ilusiones de que revoque el primer dictamen.

Raúl Sáez, presidente de la entidad santurtziarra, así lo reitera. “Por mucho que recurramos, viendo los argumentos que esgrime Competición, es difícil que saquemos algo en positivo, aunque nuestra obligación es llegar hasta el final. Es una situación injusta, porque el cambio en el reglamento, con la ampliación a 18 equipos de cada grupo de Tercera RFEF, se produce con la temporada comenzada y en este caso se premia a los que no han hecho los deberes, ya que al inicio de la liga se sabía que descendían los tres últimos de cada grupo”, añade el mandatario del Santurtzi, consciente de que “solo nos queda la pataleta”.

Sáez expresa que el Santurtzi “quiere jugar en Tercera RFEF y por eso nos hemos metido en este berenjenal, aunque apenas tenemos esperanza, porque no van a echar por la borda algo que han aprobado hace mes y medio”. El club morado asume que previsiblemente este recorrido a base de recursos tendrá su coste económico para sus arcas, como también lo tiene cuando se recurre, por ejemplo, ante la Federación Vizcaina una cartulina amarilla, con un pago de 150 euros.