bilbao - Diego Simeone relativizó el empate en Brujas, en la última jornada de la fase de grupos, en un gesto de prepotencia. La victoria ante un equipo menor como es el belga, que había perdido sus cinco anteriores encuentros, le habría supuesto al Atlético de Madrid acabar como primero del grupo A y haber tenido la suerte de quien sí acabó líder, el Borussia Dortmund, que allá por febrero se enfrentará en octavos de final de la Liga de Campeones al Tottenham, al día de hoy bastante inferior a la Juventus, para muchos el equipo más en forma de Europa. El pasado año otro desliz de los colchoneros (sendos empates ante la cenicienta Qarabag) provocó su prematura eliminación, aunque luego le vino bien y acabó ganando la Europa League. Simeone aseguró que habían tomado buena nota para esta edición, sobre todo porque el Atlético tiene, probablemente, la mejor plantilla de su historia y la gran final del torneo se juega en su estadio, el Wanda Metropolitano.

El Juventus-Atlético de Madrid es uno de los grandes duelos que ha deparado el sorteo, celebrado ayer en Nyon (Suiza), sede la UEFA, aunque no le va a la zaga el Liverpool-Bayern de Múnich, de mucho lustre y sabor, como también lo tiene el Manchester United-PSG, o el Ajax-Real Madrid, aunque el conjunto holandés hace años que está fuera del circuito de favoritos y en las seis últimas ocasiones que se ha enfrentado al equipo madrileño siempre acabó derrotado.

Hará bien sin embargo el vigente campeón de la Champions, que ahora mismo no está precisamente para tirar cohetes, de no fiarse del Ajax, que acabó la fase de grupos sin ninguna derrota, sobre todo en los dos enfrentamientos que tuvo con el Bayern, donde demostró un sugerente espíritu competitivo.

Las mismas sensaciones deben tener en el Barcelona con el rival que les ha caído en suerte. Los azulgrana nunca han perdido con el Olympique de Lyon en los seis precedentes. Como es lógico Ernesto Valverde, en declaraciones a la televisión del club, mostró una prudencia infinita, como suele ser habitual en el exentrenador del Athletic. Recordó que el equipo galo, actualmente tercero en la Ligue 1, ya ganó al Manchester City en la fase de grupos de la Champions, aunque fue su único triunfo, y luego se deshizo en elogios hacia su contrincante. “Cuando tiene espacios, me da la sensación de que es un equipo peligrosísimo, rapidísimo, porque se despliega muy bien. Creo que ahí debemos de tener un poco de cuidado”, analizó Valverde, no en vano el Barça tiene clavada la espina de su eliminación ante la Roma, en la pasada edición, por un exceso de confianza (4-1 en el Camp Nou y la debacle en la vuelta: 4-0). Messi también. Ya lo dijo al comienzo de esta temporada. Por eso su objetivo, casi desafío personal, es ganar este curso el título.

cr7 regresa a Madrid No ha transcendido la opinión de Simeone sobre el emparejamiento continental, pero sí la de su colega en la Juve, Massimiliano Allegri, que a través de Twitter lanzó un mensaje contundente: “quien tiene ambición, no tiene miedo”. El checo Pavel Nedved, leyenda de los juventinos , vicepresidente del club y presente en el sorteo, admitió: “No tuvimos suerte. El Atlético es un rival difícil para enfrentarse, es un equipo más italiano que europeo”, dijo aunque añadió que ya no hay excusa posible.

Se trata de dos equipos muy tácticos, armados como nunca para ganar la Champions, en donde el peso de sus respectivas estrellas puede ser determinante para la resolución de la eliminatoria. Supondrá el regreso de Cristiano Ronaldo a Madrid y se intuye un apasionante duelo con Griezmann, que aspira a alcanzar definitivamente el estatus de superestrella. como CR7.

El Manchester City también tuvo suerte con el sorteo, y lo mismo Roma y Oporto, en un duelo que se presume muy equilibrado.