HACE cuatro jornadas se atisbó en Ategorri un pequeño rayo de luz. Un indicio de esperanza. El Erandio se acercó a solo tres puntos de la salvación, después de permanecer en puestos de descenso de Tercera desde el mes de diciembre. Pero tres jornadas después, la situación ha vuelto a oscurecerse. Hoy, en Pasaia, a las 17.00 horas, los pupilos de Oskar Tabuenka gozan todavía de un último cartucho para salvarse, ante su más inmediato rival, al que en caso de doblegarle se acercarían a seis puntos, y en caso de derrota, se despedirían de la categoría. “No es fácil afrontar estas situaciones, porque hemos entrado en una racha bastante negativa. Lo que parecía que estaba muy negro se convirtió en gris. En estos últimos partidos no hemos sido capaces de ganar y hemos encajado muchos goles. Ahora se ha complicado el tema. En Pasaia tenemos la última bala que nos queda, vamos con la mentalidad de ganar, en ese sentido no cambia mucho el discurso. Pero sí que es verdad que el equipo está tocado anímicamente tras las últimas jornadas. Es lo que nos toca. Intentar motivar al equipo lo máximo posible para afrontarlo de la mejor manera”, analiza Tabuenka desde su perspectiva del banquillo de Ategorri.

La tarea no va a ser fácil. El Pasaia es el rival directo del Erandio, que querrá disipar cualquier duda clasificatoria, cuando restan cuatro jornadas para finalizar la liga. “Somos conscientes de que es muy difícil. Pero es nuestra obligación. Ganar al Pasaia para ponernos a seis, intentar ganar al Aurrera en casa, y esperar a ver qué han hecho ellos, porque nosotros tenemos que ganar todo y ellos tienen que perder. Es difícil, sí. Imposible, no. A mí siempre me gusta poner ejemplos de cosas que pasan. Nosotros hemos perdido muchos partidos consecutivos y a ellos también les puede ocurrir. Pero lo primero que hay que pensar es que tenemos que hacer nuestros deberes, porque, empezando por este sábado, si no somos capaces de ganar, pues automáticamente estaremos en División de Honor”, sentencia el de Otxarkoaga.

El retorno del Erandio a Tercera no ha sido precisamente un camino de rosas, pero tiene sus explicaciones. “Todos somos conscientes del momento en el que ascendimos. Con el verano muy avanzado. Incorporamos algún jugador e intentamos fichar otro tipo de jugador con más experiencia en la categoría, que podía ser importante. Los peldaños están por algo, y la Tercera no tiene nada que ver con División de Honor. Sabíamos también el presupuesto con el que contábamos y que necesitábamos unos refuerzos. Teníamos buenos jugadores, una plantilla importante, pero cualquier salto de categoría supone unos refuerzos con experiencia. No pudimos fichar ese tipo de jugador, unas veces porque llegamos tarde, no podían esperar, y en otras no podíamos llegar a lo que ellos exigían. Así que hemos arrancado con esta plantilla competitiva, pero al final no hemos dado el nivel que podíamos esperar”, relata con pena el exjugador del Athletic.

Para colmo, está en boca de todos desde esta crucial semana que el inquilino del banquillo del Erandio cambiará para el próximo curso: “No nos habíamos reunido. Hay elecciones en el club, entra una nueva directiva y estábamos esperando para hablar, intentando primero con las opciones de salvar al equipo y esperar a ver lo que te dice el club y las opciones que nos pueden salir. Sabes que de un día a otro cambia la historia del entrenador. Si salvábamos la categoría y la nueva directiva consideraba que siguiéramos, hubiéramos esperado a escuchar el proyecto que nos plantearía el club. También es verdad que si no salvábamos, ya te digo que nos queda una bala, pues mi etapa en el Erandio habría terminado. Pero no lo íbamos a comentar hasta que matemáticamente no se supiera si estábamos en Tercera o División de Honor. La nueva directiva ha hecho saber que no cuentan con nosotros. No me gusta que haya salido antes, para que el equipo dé el máximo hasta el final. Hasta no estar libres no era lógico. Pero son cosas que como entrenador no puedes controlar”.

La crucial cita ante el Pasaia es en Don Bosco, a las 17.00 horas. Son baja Manutxo, lesionado, y Jonan y Goya, sancionados.