“Ha sido bastante simple, y me encanta cuando eso sucede”. No es una fanfarronería. Max Verstappen aplastó a Mercedes en el Gran Premio de México, donde una bestial frenada en la primera curva despejó su camino hacia la gloria y aproximó el título de la Fórmula 1. El neerlandés, secundado por Lewis Hamilton y Sergio Pérez, firmó la novena victoria de la temporada para ampliar su ventaja al frente del Mundial a los 19 puntos, cuando restan cuatro carreras.

Verstappen ejecutó una brillante salida. Idílica. Desde la tercera pintura, aprovechó la larga recta de meta para enganchar el rebufo de los Mercedes. En la frenada apuró más que los coches alemanes -los tres primeros llegaron emparejados a la entrada de la curva 1- y lanzó su Red Bull por el exterior del ángulo. Cazó la primera posición. Valtteri Bottas, que llegó al embudo en la posición central, flaco favor hizo a su compañero, Hamilton, en la lucha por el Mundial. Pudo estrangular a Verstappen pero no lo hizo. Además, privó de espacio a Hamilton, quien, desencajado de la trazada buena, perdió velocidad para la salida de la curva. Pésima maniobra de Mercedes.

Con su obra maestra, Verstappen se había desempolvado de los problemas sabatinos. Podía olvidar la acción de Tsunoda, que con el coche filial de Red Bull, el AlphaTauri, interfirió en el intento de vuelta rápida del neerlandés, que tuvo que conformarse con la tercera posición de salida después de haber mostrado una gran superioridad con respecto a Mercedes a lo largo de los entrenamientos libres.

En esos compases inaugurales, Ricciardo impactó con Bottas. Mandó al finlandés a visitar los boxes. Luego se sucedieron otros incidentes que provocaron la entrada del coche de seguridad. Tras la relanzada -vuelta 4-, Verstappen se protegió de Hamilton y puso pies en polvorosa. Imparable.

Mad Max fabricó en apenas diez vueltas 5 segundos de ventaja. “Es rápido”, reportó Hamilton, perseguidor frustrado, viendo empequeñecerse el Red Bull, perdiendo la referencia. Además, señaló: “Las ruedas están cayendo de manera masiva”. Poco después, el británico imprimió ritmo. “Hamilton ha acelerado, estate con él”, reclamaron desde Red Bull a Sergio Pérez, que rodaba en tercera posición a 2 segundos del Mercedes. En el giro 18, Verstappen ya gozaba de 6 segundos de margen.

El duelo por la victoria entre Verstappen y Hamilton se fue tornando en la defensa de Hamilton por la segunda plaza. “Estos chicos son obviamente demasiado rápidos para nosotros”, describió Hamilton. Checo Pérez comenzaba a pisarle los talones. “Cierra la diferencia”, exigieron al mexicano, espoleado además ante su público. Red Bull quería atacar con un undercut a Hamilton en una carrera con previsión de una sola parada.

Mercedes buscó despistar a Red Bull indicando que estirarían la vida de los neumáticos de Hamilton más de lo previsto, pero dos vueltas después, en la 30, los reemplazaron El británico regresó a pista con tráfico, detrás de Leclerc. Tuvo la fortuna de que Ferrari decidió ejecutar el pit stop del monegasco. Hamilton encontró vía libre y reducía así las opciones de undercut de Pérez.

Verstappen paró en el giro 34. Mudó sus gomas y volvió a la pista con 8,5 segundos sobre Hamilton. Pérez, aún sin detenerse, era líder momentáneo. Al retrasar la visita al garaje, el mexicano gozaría de neumáticos diez vueltas más jóvenes que los de Hamilton.

“¿A cuánto está Pérez de Hamilton?”, preguntó Verstappen, que se podía permitir extravagancias. Su renta era de 12 segundos sobre Hamilton. En el giro 66 alcanzó la diferencia máxima de 19 segundos. Abrumador.

Pérez terminó a distancia de DRS de Hamilton. No pudo con el británico, que minimizó el daño de su paso por México. Quedan 107 puntos en juego y debe recortar 19 para firmar su octavo título. “Su coche ha sido muy superior”, lamentó. “Todavía queda mucho por delante. Pinta bien, pero puede darse la vuelta rápidamente”, dijo un precavido Verstappen, que ruborizó a Mercedes, tanto en ritmo como al ejecutar la extraordinaria maniobra que abrió la vía hacia el triunfo.

Además, Carlos Sainz firmó la sexta plaza, justo por detrás de su compañero en Ferrari, Leclerc. Mientras, Fernando Alonso fue noveno.