Los sindicatos de las fábricas de Bridgestone en Basauri y Puente San Miguel (Cantabria) trabajan este miércoles en coordinar y concretar un calendario de huelgas contra los despidos anunciados, que, según el preaviso realizado, tendrán lugar dentro del período comprendido entre los próximos 7 de abril y 31 de mayo.

Bridgestone Hispania Manufacturing anunció ayer a los sindicatos su intención de despedir a 335 trabajadores de su planta de Basauri y a otros 211 empleados de la factoría de Puente San Miguel (Cantabria).

El ERE de la multinacional japonesa fabricante de neumáticos afectará por tanto a alrededor de cuarenta por ciento de la plantilla de Basauri, que actualmente cuenta con 831 trabajadores, y la mitad de los de la factoría de Cantabria (418).

Tras considerar la medida "injustificada, inmoral, inaceptable y desproporcionada", los sindicatos anunciaron la convocatoria de una huelga en las plantas afectadas.

Preaviso de huelga

Los representantes sindicales registraron ayer ante la autoridad laboral el preaviso de huelga, con la intención de que las fechas de las movilizaciones que acuerden sean coincidentes en fechas en las plantas de Basauri y de Puente San Miguel.

En su escrito ante la autoridad laboral, los sindicatos representados en la factoría de Basauri señalan que no están de acuerdo ni con las causas ni con la magnitud de los despidos anunciados.

Se comunica también que si se diese el caso de que la empresa retirase el ERE y se sentase a negociar otras opciones, "la huelga se aplazaría durante el tiempo que duren las negociaciones".

Con la notificación el martes por parte de la empresa a los sindicatos de los despidos que plantea, se dio inicio al período de consultas del ERE, que se prolongará durante 30 días, prorrogables otros 15.

De momento, no hay fijada fecha para una próxima reunión entre los sindicatos y la dirección de la empresa, que ha planteado a las centrales el número de salidas, pero no las condiciones de las mismas.

En declaraciones a EFE-TV, el secretario del comité de empresa de la planta de Basauri, Luis Escalona, ha explicado que tras "el palo" que supuso ayer la comunicación de la empresa, los sindicatos tratan hoy de coordinar las movilizaciones a llevar a cabo en rechazo a la medida.

Preocupación en la plantilla

La plantilla, que "está nerviosa y no tiene cabeza para trabajar", está teniendo también comunicaciones con la dirección de la factoría sobre el asunto. El comité, según el representante sindical, considera que detrás de la medida hay "una deslocalización hacia las fábricas de Europa del Este" y tiene previsto presentar alternativas que impliquen garantizar los puestos trabajo.

A su juicio, en materia de jornada y calendarios "se pueden hacer cosas" y "con un poco de esfuerzo", según ha dicho, "aquí no sobra nadie". Los trabajadores han transmitido a sus representantes que "es momento de luchar", ha señalado.

Los sindicatos de la planta de Basauri también trabajan para concretar reuniones con las instituciones ante las "medidas traumáticas" planteadas y "el riesgo" en el que ven la viabilidad de las plantas afectadas.