La planta de Michelin de Gasteiz dejará de fabricar hasta final de año 2.000 toneladas de neumáticos para vehículos de obra civil, un recorte respecto a las previsiones de producción fijadas para 2023 que se ha adoptado ante el descenso de la demanda que viene arrastrándose desde hace meses. Esta decisión se produce, además, en un contexto de “pérdida de confianza” del grupo empresarial respecto a la factoría, debido los conflictos laborales registrados en los últimos meses durante la negociación del convenio, según confirmaron a la agencia Europa Press fuentes de la empresa.

La reducción de la producción de vehículos para obra civil –de 2.000 toneladas respecto a las previsiones fijadas inicialmente para este 2023– implicará el cierre de la planta todos los fines de semana hasta el puente de la Constitución, a principios de diciembre, según informaron fuentes sindicales, una medida afectará a unos 1.300 trabajadores de los cerca de 3.500 que integran la plantilla.

El recorte en la producción se debe al descenso de la demanda de neumáticos para vehículos de obra civil, que afecta desde hace meses a toda Europa, una tendencia que según la empresa no parece que pueda mejorar en los próximos meses.

MALA PERSPECTIVA

En este sentido, aunque no se han establecido la previsión de producción para 2024, desde la compañía se reconoce que “no pintan bien las cosas”. Por otra parte, entre este viernes y el lunes de la semana próxima se celebrará en la plantilla la consulta sobre la salida del comité intercentros, una medida vinculada al rechazo de los trabajadores de la planta alavesa al convenio aprobado el pasado mes de junio por las fábricas del resto del Estado que forman parte de dicho órgano. El nuevo convenio de Michelin en España para el período 2023-2026 fue refrendado por el 56,5% de los votos de los trabajadores de la multinacional en el Estado, a pesar de que en la factoría de Gasteiz más de seis de cada diez trabajadores votaron en contra.