El precio de la energía seguirá condicionando la actividad económica a lo largo de 2022 en todo el mundo. El director general del Clúster vasco de Energía (ACE), José Ignacio Hormaeche, señaló ayer martes que el elevado precio del gas y de la luz va a continuar todo el año, y la única solución es acelerar las inversiones en las energías renovables.

Hormaeche participó en Bilbao en una mesa redonda dentro del programa de charlas Heat Powered Cicles Conference 2022, en la que se estudia el futuro y la evolución de la energía en Europa tras la pandemia y la guerra de Ucrania.

"Antes de la covid y de la guerra en Ucrania ya estábamos obligados a la transición energética. Estamos en un escenario de precios altos desde el año pasado, la guerra lo que ha hecho es exagerarlos, y ahora se ha planteado el debate de la dependencia energética, con países como Alemania cuyo gas viene en un 40% de Rusia", señaló Hormaeche en declaraciones a la agencia Efe.

PROBLEMAS URGENTES

Hay tres problemas que hay que afrontar en el mundo de la energía: la descarbonización, la reducción de costes y la dependencia. Para los tres, opina Hormaeche, "la solución es más electrificación y más renovables, lo que baja emisiones, costes y te hace ser menos dependiente". Para el director del Clúster vasco de la Energía, ante la crisis actual en materia de energía "en grandes líneas, las medidas que proponen todos los gobiernos del mundo son paliativas. Los precios son los que son, porque el gas natural lo están vendiendo a millón. Sea de Rusia o venga de Argelia, Qatar o Estados Unidos, el precio es el que es", subrayó.

"Se pueden hacer cosas como ha dicho la UE de compras conjuntas, alianzas con países que mantengan un precio estable, pero a corto y medio plazo vamos a estar en un escenario de precios altos del gas natural, que es lo que marca el precio de la electricidad", indicó. En el caso de España y Portugal han propuesto a Bruselas topar el precio del gas, aunque las autoridades europeas ya han comunicado a Madrid y Lisboa que tienen que explicar mejor cómo se va a financiar para que el consumidor no abone el coste real de la energía.

"La pelea ahora es quién paga. Que no pague el consumidor porque ponemos en peligro el sector industrial y siguen elevadas las facturas domésticas, pero eso es una discusión política, no técnica ¿Quién paga?, ¿Las administraciones, las empresas, se hace un fondo que pagarán las futuras generaciones?", se preguntó. Con la primavera bajará la demanda, pero, para este experto, "sería poco realista pensar que bajará el precio, porque habrá que dotar las reservas para que cuando llegue el invierno no nos pille".

A MEDIO Y LARGO PLAZO

"Jugar a medio y largo plazo es la única solución. Si no empezamos ahora con las renovables, dentro de un año, dos o cinco estaremos igual. Vayamos haciendo la eólica terrestre, la off shore (eólica marina) fija y la solar fotovoltaica", instó Hormaeche.

Pero también hay problemas: la lentitud de las autorizaciones y permisos. "Hay opciones que se pueden hacer mañana mismo y que no se están haciendo a la velocidad que se puede. Es una paradoja, decimos que hay que hacer cada vez más renovables pero a las empresas que se dedican a promover renovables les cuesta un mundo cada parque eólico y fotovoltaico, cuesta tres veces más tiempo tramitarlo que construirlo".

Conclusión: "las predicciones son peligrosas, pero por lo menos en lo que queda de año habrá un escenario de precios altos seguro. El corto plazo habrá que sobrevivirlo, tratar de compensar a los consumidores todo lo que sea posible, y acelerar las renovables".

El ciclo de conferencias, coordinado por el Departamento de Ingeniería Energética de la UPV/EHU, se prolonga hasta hoy en Bilbao y cuenta con la participación de más de 50 ponentes procedentes de 25 universidades y empresas, que analizan las innovaciones y retos pendientes en materia energética.

"En lo que queda de año vamos a ver un escenario de precios altos en materia energética"

Director Clúster vasco de la Energía