Bera Bera 25

Zuazo 25

SUPER AMARA BERA BERA: Fernandes, Arrojeria (5), Oliveira (1), Pizzo, Teres (3), Menéndez (1), Hernández (1), Cavo (4), Echeverria, Cesáreo (3), Cardoso (5), Etxeberria, Moreno (2) y Lais.

ZUBILETA EVOLUTION ZUAZO: Velasco (1), Hernández (1), Sánchez (5), González, Isabel (3), Barros, Aalla, Arozamena, Loidi (6), Encina, Erauskin (2), Bengoetxea (1), Romero y Magdalena (6).

Parciales: 3-3, 6-6, 7-9, 9-10, 11-10, 14-11 (al descanso); 15-12, 17-14, 18-17, 21-18, 23-21 y 25-25.

Árbitros: Jorge Escudero y Jesús Escudero excluyeron a la local Pizzo; y a Encina (2), Bengoetxea y Magdalena del Zuazo.

Incidencias: Partido disputado en el José Antonio Gasca a puerta cerrada.

A falta de tres segundos para el final, con el Zubileta Evolution Zuazo por debajo en el marcador por tan solo un tanto, la pelota le llegó a Ainhoa Hernández. La pivote barakaldarra apenas había podido intervenir en los ataques posicionales de su equipo. El Super Amara Bera Bera, flamante líder de la Liga Guerreras Iberdrola y gran conocedor de su potencial, no se lo había permitido. Pero la capitana rojinegra apareció justo a tiempo. Justo cuando el encuentro agonizaba. Así que, a falta de tres segundos para el final, la pelota le llegó a Hernández. No era una recepción sencilla y, además, la zuazotarra estaba de espaldas a la portería; pero el pivote es su morada. Su terreno en propiedad. Por lo que la capitana acomodó el balón entre sus manos, forcejeó con la defensa azul y sacó un lanzamiento que besó la red del José Antonio Gasca. Hizo que el marcador luciera un justo 25-25 y, entonces, sonó la bocina.

Así, el Zuazo sumó un punto clasificatoriamente trivial, puesto que las rojinegras ya se saben en la lucha por la salvación. Pero un punto de orgullo y de autoestima. De calidad y fe. Porque las de Joseba Rodríguez llegaron a Donostia tras unos encuentros irregulares y de malas sensaciones. Y se marcharon con la moral alta y la certeza de que, con intensidad, pueden ganar a cualquiera. De hecho, aunque fue el Zuazo quien forzó el empate en el último suspiro, también pudo llevarse la victoria. Es más, las rojinegras entraron mejor al encuentro y dominaron el luminoso en los primeros parciales. Sin embargo, cuando el Bera Bera entró en calor, consiguió remontar al descanso (14-11).

Con todo, el conjunto barakaldarra no había dicho su última palabra y salió de los vestuarios con ganas de vender su piel muy cara. Así, a pesar de que a falta de cinco minutos para el final el Bera Bera dominaba por tres tantos, mantenerse en el partido recompensó a las vizcainas con un punto de orgullo.