BILBAO. Según han informado los organizadores, los clavadistas han contado con dos horas y media para esta primera de contacto con la renovada plataforma en la que, a partir de este viernes, se disputarán el triunfo de la última parada de la temporada 2019 de Red Bull Cliff Diving.

Antes de lanzarse desde el puente bilbaino, por la mañana los saltadores han acudido al club Martiartu para comenzar a practicar sus saltos desde los trampolines de tres, cinco y 10 metros, que han servido como toma de contacto antes de enfrentarse a alturas mayores.

Este viernes el espectáculo regresará al Puente de La Salve partir de las 16.30 horas con las primeras rondas de la competición.

Será el momento de comprobar si alguien reta el dominio del británico Gary Hunt y la australiana Rhiannan Iffland, los dos grandes dominadores de la serie mundial durante esta temporada en sus respectivas categorías.