Dani Alves, uno de los jugadores que forman parte de la mejor historia futbolística del Barça, regresará al equipo azulgrana a petición expresa de Xavi Hernández, el nuevo entrenador, pese a los 38 años que gasta el lateral derecho hispano-brasileño. En una escueta nota, el club catalán informó anoche que ha llegado a “un principio de acuerdo” con el jugador, que se incorporará a los entrenamientos la próxima semana, pero no podrá debutar hasta que comience el próximo año. Su contrato, en principio, será por lo que resta de temporada, pero incluirá una cláusula que permitirá alargarlo hasta junio de 2023 si ambas partes lo consideran oportuno.

“¡¡¡Torno a la meva casa (vuelvo a mi casa) cullonsssssss!!!”, escribió Alves en catalán en las redes sociales para festejar la buena nueva, decidido, dice, a “ayudar a reconstruir” el que considera como “el mejor club del mundo”.

Dani Alves estaba sin equipo desde el pasado septiembre, cuando rescindió su contrato con el Sao Paulo por impago, y lo hizo semanas después de conquistar el oro olímpico en Tokio derrotando a España en la final. Con este título, el número 44 de su dilatada carrera, el futbolista de Bahía ha ganado todo lo que se puede ganar en el fútbol profesional, pero quiere más. Necesita reengancharse a la competición, reveló días atrás, porque aún aspira a jugar con la canarinha el Mundial de Catar 2022.

Y qué mejor forma que hacerlo en el equipo donde brilló como nunca, sobre todo aquel 2009, el año del sextete con Pep Guardiola como entrenador y Xavi Hernández comandando el centro del campo. Alves ganó 3 Ligas de Campeones, 6 Ligas, 4 Copas, 4 Supercopas de España, 3 Mundiales de Clubes y 3 Supercopas de Europa en las ocho temporadas en las que estuvo de azulgrana, desde 2008, cuando arribó procedente del Sevilla, hasta 2016, momento en el optó por cambiar de aires y fichar por la Juventus.

Estuvo una campaña enrolado en la Vecchia Signora, donde ganó un título de la Serie A y una Copa de Italia.

Sus ansias por nuevas experiencias llevaron al lateral brasileño al PSG. En dos temporadas en la capital francesa levantó un total de 6 títulos. Dos Ligue 1, una copa de la Liga, una copa francesa y dos Supercopas.

En el verano de 2019 regresó a su país natal, de donde había salido en 2002 para fichar por el Sevilla, se convirtió en pieza esencial en el Sao Paolo y lograr el campeonato Paulista.

Roto el vínculo con los brancos, Alves se ha encontrado con ese tipo de ofertas que no se pueden rechazar a cierta edad, por muy en horas bajas que esté ahora el Barça. Sin embargo no podrá ser inscrito hasta que se abra el mercado invernal de fichajes, el próximo 1 de enero. El Barça tiene una ficha libre, la que dejó vacante Pjanic, pero cuando el defensa brasileño se quedó sin equipo ya se había cerrado el mercado de verano.

Cuatro para el puesto

De cara al mercado invernal, Xavi pretende que el club azulgrana se refuerce con otras dos contrataciones. En Barcelona se está especulando mucho con la figura del delantero inglés Raheem Sterling, quien ha mostrado su contrariedad por la escasa relevancia que, a su juicio, le brinda Pep Guardiola en el Manchester City.

La que está asegurada es la incorporación de Dani Alves para una demarcación que, paradójicamente, está bien nutrida, con Óscar Mingueza, Sergiño Dest y Sergi Roberto. Por lo que parece, Xavi no debe tener mucha confianza en ellos.