bilbao - La emoción que embargaba a todo el Lointek Gernika tras vencer al Tsmoki Minsk, romper otra barrera en su historia y meterse entre los dieciséis mejores de la Eurocup tenía su razón en que el equipo logró algo que "quizás no se vuelva a repetir", según admitió Mario López. El técnico lleva más de 30 años en el club y sabe que los resultados caminan ahora mismo muy por encima de las expectativas que podría generar una entidad de alcance limitado. Pero la ambición siempre ha sido seña de identidad del Gernika y el siguiente hito espera de nuevo en Hungría dentro de dos semanas.

El Atomeromu KSC Szekszard será el cuarto conjunto magiar al que se enfrenten las gernikarras. Primero, fue el Cegled en la temporada del debut. Luego, el Uni Gyor en la fase de grupos de la anterior y de la actual campañas. Y ahora este equipo del sur del Hungría, a no más de hora y media de la frontera con Croacia, será el siguiente capítulo de un sueño al que nadie quiere poner fecha de caducidad. El primer partido de la eliminatoria de octavos de final se jugará el jueves 23 de este mes en Maloste. La vuelta en cancha húngara será el miércoles 29.

El escollo a salvar es importante ya que el KSC Szekszard es un conjunto con experiencia en estas lides de la competición. La temporada pasada las húngaras alcanzaron los cuartos de final antes de caer por solo un punto en el acumulado ante el Girona. En la 2017-18, cedieron en octavos de final ante el Hatay turco. Ahora, llegan a esta instancia tras ser primeras de su grupo con cinco triunfos y una derrota, lo que les eximió de esta ronda clasificatoria. El serbio Zeljko Djokic dirige a una plantilla que destaca por su tamaño, con cuatro jugadoras por encima de 1,90 metros, y por utilizar una rotación corta. El peso recae en el cuarteto que forman las estadounidenses Tyaunna Marshall y Erica McCall, la eslovaca Marie Ruzickova y la croata Ivana Djokic. Entre las cuatro anotan 58 de los 72 puntos que el equipo anota en la Eurocup. Además, el KSC Szekszard rebotea muy bien y es el octavo de toda la competición en esa área del juego.

hoy en la laguna La ilusión no se apaga en Gernika, pero la competición no se detiene y sin apenas descanso el equipo afronta hoy (20.00 horas, Teledeporte) el duelo de la Liga Femenina ante el Clarinos Tenerife. Las jugadoras cogieron ayer un vuelo y con solo un ligero entrenamiento matinal tratarán de derrotar al primer rival que las derrotó esta temporada en Maloste cuando una defensa en zona provocó en el ataque de las locales, que cedieron en la prórroga. El conjunto tinerfeño, recién ascendido, arrancó bien la competición y logró meterse en la Copa, pero se ha desinflado y acumula cuatro derrotas en los últimos cinco partidos, lo que ha llevado a buscar refuerzos. Se marchó la croata Iva Brkic y hoy debutarán las veteranas senegalesas Bintou Diamé y Astou Traoré. Sin embargo, las jugadoras a vigilar por la defensa gernikarra serán Tanaya Atkinson, máxima anotadora de la temporada, y Lyndra Weaver, que suman 33 puntos entre las dos.