Bilbao - Con la alegría de la victoria en el cuerpo y tras una celebración que fue más allá del bocinazo final, los jugadores del Bilbao Basket recibieron ayer otro homenaje más de la ciudad que tanto cariño les dio en los últimos días. Los hombres de negro fueron recibidos en el Ayuntamiento de Bilbao y tras el acto protocolario, en el que recibieron las felicitaciones del alcalde Juan Mari Aburto, salieron al balcón para compartir el logro conseguido con unas setecientas personas que decidieron ayer acercarse hasta el consistorio. El Bilbao Basket es un equipo unido a su afición, jugadores llegados de fuera que no tardan en adaptarse a la ciudad y sentirse unos bilbainos más. Por ello, acabada toda ceremonia, la plantilla bajó a la calle para mezclarse entre con los aficionados e intercambiar abrazos y agradecimientos mutuos.

“¡Somos ACB!”, fue la arenga realizada por Javi Salgado. El deseo cumplido de un bilbaino más que ayer celebró con sus vecinos la vuelta del club de su vida a la élite. Al igual que lo hizo hace quince años en León, el base de Santutxu volvió a formar parte de la historia del Bilbao Basket y el público se lo agradeció con una de las mayores ovaciones del día y constantes peticiones de que se quedara en el equipo un año más. El propio capitán fue el último en llegar al autobús, sin dejar de contestar a ninguna muestra de cariño y parándose con los aficionados cuantas veces fuera necesario.

Otro de los más felicitados fue Thomas Schreiner. El base austriaco, héroe de los minutos finales con aquel triple que ya es parte de la memoria gloriosa del club, reconoció sentirse bilbaino “a muerte” y dejó claro que son ellos los que tienen que estar agradecidos: “Nos están dando las gracias, pero somos nosotros los que tenemos que hacerlo. Gracias a ellos hemos conseguido esto. Había jugado muchas veces como visitante en el Bilbao Arena, pero nunca hubiera imaginado que esto fuera tan increíble y ahora entiendo de verdad el efecto Miribilla”.

Juan Mari Aburto también quiso reconocer el trabajo realizado por todos los integrantes del Bilbao Basket. “Habéis hecho posible un sueño. Desde la adversidad, partiendo con muchas dificultades, pero con los valores que distinguen a este pueblo y a sus gentes: esfuerzo, compromiso, entrega y trabajo”, declaró el alcalde de Bilbao, que quiso resaltar la figuras de Álex Mumbrú y Javi Salgado, “ejemplos de que los valores y el trabajo en equipo mueve montañas”, añadió. También lanzó un mensaje con vistas al futuro y pidió “seguir trabajando con humildad” y deseó que las puertas del consistorio volvieran a abrirse para volver a vivir otra celebración como la de ayer y esta vez como equipo de la ACB.