Olimpiada es el tiempo que transcurre entre unos Juegos y los siguientes; y esta que separa a Tokio de París es más corta de lo habitual. La pandemia de covid-19 obligó a retrasar la cita japonesa, prevista para 2020 finalmente tuvo lugar en 2021, por lo que este ciclo olímpico tan solo constará de tres años. Y ya se han consumido dos. Y es que el 26 de julio de 2024 se estrenarán los Juegos de París. Es decir, quedan 366 días –es año bisiesto– para que el pebetero se encienda de nuevo y dé comienzo una edición cuyo reto es el regreso absoluto a la normalidad. Porque habrá muchas diferencias entre Tokio y París, pero la principal, esencial y fundamental, será el público.

La cita francesa volverá a abrir los estadios, piscinas y pistas a los espectadores; que podrán ver en directo cómo el breaking se estrena en el programa olímpico. Este nuevo deporte se unirá así a la escalada, el skateboarding y el surf en el intento del Comité Olímpico Internacional (COI) de conectar con el aficionado más joven. Pero la competición de breaking no será la única novedad porque también se desvelaron ocho nuevos eventos que tienen el propósito de conseguir la paridad de género. Así, en vela habrá competiciones de kitesurf, 470 y regatas oceánicas; en piragüismo debutarán el eslalon extremo femenino y masculino, en boxeo se meterá una nueva categoría de peso para mujeres y en tiro se incluirá el skeet mixto. Sin embargo, la novedad que más ampollas levantó fue la sustitución de los 50 kilómetros marcha por una prueba de relevos mixto de cuatro postas.

Tercera vez en París

Con todo, no será la primera vez que los Juegos se celebren en París. La capital francesa fue la cuna de las ediciones de 1900 y 1924. Así que 100 años justos después volverá a cobijar el mayor evento deportivo del planeta. Y la organización francesa quiere sorprender. Quiere que el mundo entero quede fascinado. Por eso, por primera vez en la larga vida de los Juegos la jornada inaugural no tendrá lugar en el estadio olímpico, sino que se llevará a cabo sobre las aguas del Sena. El objetivo es que la ciudad sea el mejor telón de fondo, así que los 10.000 atletas de las 206 delegaciones que se esperan discurrirán por el río subidos a 162 embarcaciones. Serán 45 minutos de un desfile que pasará por Nôtre Dame, el Louvre y, por supuesto, la Torre Eiffel; y que podrá ser seguido en directo por 600.000 personas –diez veces más de las que caben en el Stade de France–, cumpliendo así el propósito de abrir la participación al mayor número de personas posible. Es decir, cumpliendo el propósito de que estos sean los Juegos del público y de la gente.