Ha costado, pero mañana se pone a la venta Plastic drama, el cuarto disco del grupo vizcaino Belako, convertido en los últimos tiempos en el más internacional del rock alternativo estatal. Aunque la cita llega con meses de retraso debido a la pandemia del coronavirus, el cuarteto está excitado, pero sin nervios, ya que “tenemos confianza con el álbum; tiene canciones muy coreables”. Hoy mismo, la banda lo presentará en directo en Bilbao, en el auditorio de Euskalduna Jauregia, a las 21.00 horas, “con muchas ganas y encantadas”, explican.

Con sendos conciertos en Bilbao, mañana, y Barcelona y Madrid, el fin de semana, celebrará Belako la salida al mercado de Plastic drama, su nuevo disco, que sus seguidores ya disfrutaron en vivo con su previa minigira por tres autocines estatales, incluido el de Getxo. El grupo, uno de los primeros de todo el Estado que se atrevió a improvisar escenarios después del trimestre del confinamiento, busca acabar “este verano tan raro de una manera bonita”, y en contacto con sus seguidores.

“Resulta raro no tener el rodaje de estar tocando de manera continuada”, explica a DEIA Cris Lizarraga, la vocalista del grupo. “Sale un concierto cada mil años y en unas condiciones extrañas. Por ello, sí existe un cierto recelo, aunque nosotras, como siempre, intentaremos dar lo mejor de nosotras mismas en estos conciertos. Y más teniendo ahí, en Bilbao, amigas y familia apoyando, que siempre hace que las condiciones mejoren”, prosigue la portavoz de Belako.

El grupo afronta el concierto de esta noche “con muchísimas ganas” porque “nos hemos pasado todo julio y agosto sin tocar”. Según su cantante, “editar el disco y volver a ensayar y a tocar, y hacerlo en casa y en un lugar con el Euskalduna, impresiona y da ganas”, asegura. Y aunque el cuarteto ya había actuado en el palacio bilbaino, considera especial este recital, ya que lo hará en su auditorio principal, “que tiene unas magnitudes terribles y, por lo tanto, estamos encantadas de estar ahí”.

Carne de escenario

Belako, que asegura ser “una banda de directo que necesitamos del público, al depender mucho de esa energía que transmite quien te esté viendo y dándolo todo”, publicará mañana Plastic drama. “Estamos con ganas, aunque con menos nervios de lo habitual, ya que hemos ido adelantando singles y comprobado que han tenido buen recibimiento”, indica Cris, que expresa “mucha confianza en que los temas van a gustar a la gente que nos sigue. ¡Ojalá pudiéramos estar presentándolo en otras condiciones, pero el disco ahí está!”, apostilla.

Canciones como The craft, Truth o Marinela 2017 confirman que Plastic drama es “muy ecléctico” en lo musical, según Cris, y que sus temas “entran más fácil que los de discos anteriores porque son muy coreables y parten de pocos elementos en comparación con lo anterior”. La cantante indica que el sonido ecléctico de Belako puede “dejarnos en tierra de nadie”, pero defiende “la comercialidad” de sus canciones nuevas. “Lo digo en el buen sentido, el de gustar a gente diferente”, apostilla Lizarraga.

Las de Mungia llevan meses hablando del “compromiso” de Plastic drama. “Busca el verdadero significado de las cosas en un mundo que traduce todo en unas líneas de ensamblaje, fabricación y explotación de seres vivos”. Esa, según Cris, es “la dura realidad a la que se enfrenta nuestra generación y el buen uso de la nueva tecnología, que es la capacidad de correr la voz y y llamar la atención”. La cantante también resalta “el aspecto cínico” del álbum, como “reflejo” de su generación. “Se preocupa, pero no demasiado, porque vivimos en el privilegio; así que nos reímos un poco de eso también”, concluye.

Las entradas para el primer concierto de la gira en el Euskalduna Jauregia están a la venta en la web del palacio y en los cajeros multiservicio de Kutxabank al precio de 22 euros, gastos de gestión incluidos. La actuación está adscrita a la campaña #KreoEnTiKultura, lo que incluye 5 euros de descuento por entrada siempre que se compre en la página web https://ticket.kutxabank.es/kreoenti/public/janto/#.

Así son las canciones

‘Sirene’. “El título juega con ‘si réelle’, que significa tan real. Nos sirve como retrato alegórico de una persona trans cuya imagen nos ha sido ocultada y que sin embargo en un contexto de aparentar lo que no somos, lucha porque se reconozca y se acepte su apariencia. Es un sueño en el cual como con un destello en la oscuridad, nuestros ojos se adaptan a a la luz que desprende para verlo”

‘Truth’. “En conexión con Truce, viene a decir basta a los mitos del amor romántico en los que nos hemos educado, normalizando los roles de poder y abuso como parte del enamoramiento. Unas dinámicas al servicio del sistema que nos quiere monógamas, codependientes y posesivas”.

‘Profile anxiety’. “Está dedicada a las redes sociales y a las relaciones engañosas que establecemos en ellas. Los perfiles que seguimos ocupan nuestro archivo de memoria y aparecen en nuestros sueños hasta el punto en que creemos conocer a quien no ha intercambiado ni un saludo con nosotras, y de quien solo vemos la parte de su vida que decide mostrar. Proyectan una participación pasiva y mantienen falsas apariencias”.

‘All nerve’. “Esta canción es un buen despertador para recordarnos que las estructuras de poder siguen ahí, incluso durante la cuarentena. Que son el virus que permanece”.

‘Truce’. “Significa tregua. Esta letra dinamita los pilares del amor romántico codependiente por el que hemos normalizado comportamientos abusivos y angustias innecesarias. Habla de darse tregua por sentirse bien sola, como acto de resistencia”.

‘Marinela 2017’. “Es una odisea en el espacio de tu propio ser, el ostracismo social autoinfundado por la incapacidad de aceptarse. Es cuando te sales de tu eje y sientes que observas todo lo que te ocurre desde fuera. Te conviertes en espectadora de tu propia vida y de lo que te estás haciendo. Encerrada en tu burbuja, te vas alejando más y más de lo que eres y de quienes te rodean. La inercia autodestructiva te lleva a la deriva, hacia un lugar desconocido y hostil desde el cual es cada vez más difícil encontrar el camino de vuelta a casa”.

‘The craft’. “Es una referencia directo del contexto cultural de nuestra adolescencia en los años 90, pero es también aquí y ahora; ahora o nunca”.

‘Tie me up’. “Representa la cadena de montaje en la que nos encontramos, una inercia que aboca a la explotación de seres vivos y ecosistemas, vista desde la parte privilegiada de nuestra sociedad, en la que no se puede distinguir consumo de producción, mientras somos consumidas por el tiempo de la inmediatez”.