oviedo - El escritor estadounidense Richard Ford, galardonado con el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2016, se mostró “inmensamente agradecido y honrado” tras el reconocimiento, “además de un poco sorprendido”.
Ford celebró el papel de la literatura, que aúna a los lectores de todos los países que a priori se sienten “diferentes y alienados”. El autor aseguró que este premio le anima a seguir escribiendo nuevos libros en el futuro, y también afirmó que ha sido una “bonita sorpresa”, a la vez que inesperada. Del mismo modo, el autor remarcó el importante papel realizado por los traductores: “Creo que la traducción es la clave de todo. Es la libertad”, dijo el escritor aplaudiendo que su intermediación permite operar en todos los idiomas.
“Tener lectores en España siempre ha sido un gran y generoso regalo para mí, que ha llegado a través de la lealtad y la persistencia de mi editorial desde hace mucho tiempo, Anagrama, con la que comparto este día feliz. Los escritores escriben libros para los lectores; así que, cuando se reconoce a uno de nosotros, es un buen día, tanto para la escritura en su conjunto como para todos los lectores. Gracias”, añadió Ford. Además, aseguró que “la literatura está haciendo su trabajo en el mundo y atravesando fronteras entre idiomas”.
sus inicios Richard Ford (Jackson, EEUU, 1944) se licenció en Literatura en 1966 en la Universidad Estatal de Míchigan y comenzó Derecho en la Universidad de Washington en San Luis, estudios que abandonó por un máster de Escritura Creativa en la Universidad de California en Irvine (1970). En 1971 una beca de la Universidad de Míchigan le permitió comenzar a escribir su primera novela, A Piece of My Heart (Un trozo de mi corazón, 1976). Fue profesor en el Williams College de Massachusetts y en las universidades de Princeton, Harvard, Northwestern y Míchigan. En 1981 trabajó como periodista deportivo en Inside Sports, en Nueva York, hasta que el diario fue vendido, dedicándose desde entonces por completo a la literatura. En esa época nació su personaje más conocido, Frank Bascome, protagonista de varios de sus libros.
Heredero Considerado por algunos el heredero legítimo de Hemingway, influido, como él mismo ha reconocido, por Faulkner, y calificado por Raymond Carver como el mejor escritor en activo de EE.UU., nunca ha aceptado que se le incluya dentro del “realismo sucio”, una derivación del minimalismo caracterizada por su tendencia a la sobriedad, la precisión y la parquedad extrema en el uso de las palabras en las descripciones.
Ford admite, sin embargo, que esta adscripción le ha servido para darse a conocer en Europa. Sus personajes suelen ser seres vulgares, con vidas convencionales, que se mueven en atmósferas densas. Ha sido tachado por ello de hacer una literatura pesimista y de narrar historias frías protagonizadas por unos personajes desolados y sin esperanza, pero él sostiene que un escritor es el fruto de su experiencia y que las situaciones y emociones a las que es sensible se convierten para él en material de su producción.
obra Richard Ford ha publicado, además de la ya citada, las novelas The Ultimate Good Luck (La última oportunidad, 1981); Wildlife (Incendios, 1990), la trilogía protagonizada por Frank Bascombe, un escritor fracasado de New Jersey que trabaja primero como periodista deportivo y después como agente inmobiliario (El periodista deportivo, 1986; El día de la independencia, 1996, y Acción de gracias, 2006), Canadá (2012), recibida con gran entusiasmo por la crítica, que la calificó como “un diez absoluto”, y Let Me Be Frank With You, 2014 (Francamente, Frank, 2015), cuatro historias narradas por Bascombe.
Es también autor de los libros de narraciones cortas y cuentos como Rock Springs (1987), Women with Men (De mujeres con hombres, 1997) y A Multitude of Sins (Pecados sin cuento, 2002). Cuentos imprescindibles (1998), antología de Antón Chéjov, el ensayo Flores en las grietas. Autobiografía y literatura (2012) o la obra completa de Eudora Welty son algunas de sus publicaciones como antólogo y editor.- Europa Press