El guipuzcoano Ion Izagirre se impuso este sábado en el XXIV Gran Premio Miguel Indurain, disputado en Lizarra (Nafarroa) sobre 203,2 kilómetros, tras imponerse al colombiano Sergio Higuita, que no fue capaz de aguantar el pedaleo del ciclista del Cofidis en los últimos metros del Alto de Ibarra.

El tercer puesto fue para el danés Mattias Skjelmose Jensenque, que consiguió descolgarse, pero demasiado tarde, para poder tener posibilidades de hacer cima en el podio de Lizarra. Le siguieron agrupados su compatriota Andreas Kron y el español Roger Adrià.

Los primeros compases de la carrera los marcó una escapada temprana de Mikel Bizkarra, Xavi Canellas, el italiano Alessandro Fancellu y el belga Matyás Kopeck, este último integrante del Team Novo Nordisk y caracterizado por ser el único equipo profesional del mundo formado solo por ciclistas con diabetes.

La fuga consiguió mantener una distancia de unos 4 minutos respecto pelotón a lo largo de un trecho considerable, pero ya en el comienzo del alto de Guirguillano, la segunda subida puntuable, arrancaron a 2 minutos, reduciéndose paulatinamente la diferencia hasta ser cancelada la fuga a falta de 60 kilómetros para la meta con un tirón del pelotón liderado por el Kern Pharma.

A pesar de llegar ya dentro del pelotón, Bizkarra pudo colocarse a la cabeza en el momento clave y puntuar en el alto de Lezaun para refrendar el liderato de la montaña al sumar 6 puntos tras haber liderado también en el alto de Guirguillano, de Primera categoría y que le proporcionó 10.

La dinámica la rompió Javier Romo en el entorno de Abartzuza, pero le duró poco el impulso hasta la subida en el penúltimo paso por el alto de Ibarra, donde no pudo aguantar el ritmo de un pelotón que cruzó la meta volante a falta de 28 kilómetros en la ciudad del Ega rompiéndose por el ritmo encabezado por la dupla entre Nelson Oliveira y Álex Aranburu, del Movistar.

Oliveira tardó poco en atacar en solitario, pero se le enganchó Luis León Sánchez, del Astana, que le acompañó tomando la cabeza hasta ser alcanzados a falta de 12 kilómetros, cuando comenzó un baile de tirones en subida que llegó al alto de Eraul con Ion Izagirre (Cofidis) y Sergio Higuita (Bora) ligeramente adelantados.

Aunque no consiguieron marcar una gran distancia ambos en un descenso frenético con la mira puesta en Estella, consiguieron llegar solos al Alto de Ibarra, donde protagonizaron unos metros espectaculares de sufrimiento impulsados por el ambiente de un público entregado en los últimos metros de una subida que se le resistió a Higuita.

Así Izagirre logró arañar unos segundos que le valieron para enfilar con seguridad la recta final del paseo de la Inmaculada de Lizarra para cruzar, puños en alto, la línea de meta a dos segundos de su compañero de ruta en los últimos kilómetros.