Dumoulin no quiere a Froome en el Giro

bilbao - “Es una enorme motivación estar aquí y quiero la triple corona”. La triple la corona a la que aludió Froome son el Tour, la Vuelta y el Giro, la carrera que le resta y a la que se ha alistado en su 101ª edición, sin saber aún si le contabilizarán la Vuelta que se mantiene en suspenso después del resultado adverso por salbutamol. En el libro de contabilidad de Froome, la Vuelta está envuelta en celofán. Para el líder del Sky es una victoria que le pertenece, si bien eso deberá resolverse entre científicos y abogados en los próximos meses. “Esto, ciertamente no es algo en lo que piense en esta carrera”, explicó durante la rueda de prensa previa a la salida del Giro de Italia, que se enciende mañana en Jerusalén Oeste con una contrarreloj de 10 kilómetros.

Es más, a pesar del debate abierto sobre la idoneidad de la participación de Froome en el calendario ciclista desde que se supo su resultado anómalo, el británico, cuya última aparición en el Giro data de 2010, ni siquiera se plantea no estar en las próximas grandes citas. Desde los tacos de salida de la carrera italianasigue pensando en el Tour. “Obviamente sé que no hice nada malo. No hay nada que diga que no debería competir. Creo que sería una gran lástima para la carrera si el defensor del título y cuatro veces ganador no puede estar en esa salida, incluso si el proceso y las reglas dicen que él puede. Sería una gran pérdida para el deporte”.

En ese ambiente, el líder del Sky pretende entrar en el club más selecto y convertirse en el tercer corredor de la historia, tras Eddy Merckx y Bernard Hinault, que enlaza la gloria de la tres grandes encadena de manera consecutiva. Para ello, Froome no se reservará. “No voy a contenerme en el Giro”, explicó el británico en una entrevista concedida a Eurosport. Tampoco tiene intención de reprimirse Tom Dumoulin, campeón en curso, que está dispuesto a defender el título logrado el pasado año. El holandés no se mordió la lengua respecto a al presencia de Froome en el Giro. “Es su decisión estar aquí. Si yo estuviera en su misma situación, no estaría aquí. Esto no es bueno para el ciclismo. A todos nos gustaría que no hubiera ocurrido, incluido Froome”, expuso el holandés, que dijo llegar bien a la carrera italiana.