LOS tiempos han cambiado, no estamos en el lejano oeste que era el ciclismo hace diez o quince años, no hay razón para que se mantenga el mismo nivel de sospecha”, reclama Chris Froome, líder del Sky, amarillo en el Tour. La petición del británico, al que un aficionado arrojó un recipiente con orina en la etapa del sábado al grito de “dopado” -su compañero Richie Porte también padeció una agresión-, llega en un momento en el que el ambiente de animadversión hacia el Sky es cada vez más evidente. Ante estos hechos, la organización de la carrera ha decidido proteger a los componentes del Sky con unidades de la Gendarmería, algo que no ocurría en el Tour desde la época de Armstrong.
La presencia policial abrazó al Sky desde la salida. El autobús del equipo inglés fue custodiado por los gendarmes antes de que la carrera se pusiera en marcha. “Me extrañó ver a la policía, pero es así, nada cambiará a nuestra victoria en París si la logramos”, indicó el británico, que culpó, otra vez, a los periodistas de predisponer al público contra ellos al emitir dudas sobre su limpieza y rendimiento. “Si se dice a la gente que sea desconfiada, pasa lo que pasa (...) La realidad es que Richie ha sido golpeado, le han escupido, me tiraron la orina, es inaceptable. Lo único que puedo hacer es denunciarlo. No acepto que exciclistas aticen la sospecha porque ellos solo conozcan una forma de hacer ciclismo”, expresó Chris Froome, enojado por lo que está ocurriendo, por la continuas sospechas que rodean el rendimiento de los corredores del Sky.
La exhibición de Saint-Martin De eso versaba un reportaje emitido por France 2, en el que un experto en rendimiento deportivo, Pierre Sallet, diseccionó el ascenso de Froome a la Pierre Saint-Martin. Según sus cálculos, el británico desarrolló al menos 7,04 vatios por kilo de peso. Para Sallet esas cifras son sospechosas de dopaje puesto que en el pasado, superar los 7 vatios por kilo suponía dar positivo en los controles antidopaje. A la opinión de Sallet se sumó la de los exciclistas Laurent Jalabert y Cédric Vasseur, que realizan comentarios sobre la citada etapa. Ambos dudaron del origen de la superioridad de Froome. Frente a estos testimonios, Dave Brailsford, cabeza visible del Sky, salió al frente de tales afirmaciones. “Es difícil aportar la prueba de que no se es culpable”. Presente en el estudio de France 2, Brailsford aseguró que se trata de “estimaciones” y no precisó si las mismas eran o no correctas. “No prueban nada”, subrayó. A continuación, el responsable del Sky, explicó que “Froome tiene una fisiología especial, pero no hace trampas”.