Los frutos de las obras de recuperación del Torreón del Serantes impulsadas por el Ayuntamiento de Santur-tzi con la colaboración de Aranzadi, van más allá de la mejora estética de este histórico fuerte con más de 150 años de historia. La asociación de defensa del patrimonio cultural y natural, Hispania Nostra, ha incluido al Torreón del Serantes en su Lista Verde del Patrimonio. Este listado reconoce a aquellos elementos patrimoniales que, tras la realización de los pertinentes trabajos de recuperación, su correcta conservación está asegurada.
La inclusión del Torreón del Serantes en la Lista Verde se oficializó hace menos de dos semanas y, de esta manera, el fuerte ubicado en la cima de la montaña santurtziarra ha pasado a formar parte de una selecta lista de 167 elementos patrimoniales entre los que figuran el Monasterio de Santa María de Toloño en Labastida, la icónica Torre de Hércules de A Coruña y el Valle de los Caídos, entre otros. Con esta nueva nominación, las fortalezas santurtziarras desaparecen de otro de los listados que elabora Hispania Nostra, la Lista Roja, una relación de elementos patrimoniales que se considera que están en peligro. El Torreón del Serantes figuraba en ese listado desde enero de 2009 por lo que, con esta nueva nominación, el edificio abandona esa preocupante Lista Roja tras permanecer en ella más de una década. La inclusión en la Lista Verde de Hispania Nostra supone un espaldarazo al proyecto de recuperación de este torreón que inició el Consistorio marinero allá por 2017. Dichas obras constaron de dos fases y en ellas el Ayuntamiento invirtió más de 250.000 euros. El objetivo era recuperar esta fortaleza que estaba en estado de ruina y que, desde junio de 2017 cuenta con la valoración de Bien Cultural por parte del Gobierno vasco.
Así las cosas, las obras dieron comienzo en octubre de 2018. Las labores a realizar fueron múltiples, desde el desbroce y la limpieza del entorno del edificio a la parte más crítica de los trabajos, la recuperación de los muros y otros elementos de esta fortaleza construida entre 1879 y 1881. Desde el Consistorio marinero, se anunció que, pese al estado en el que se encontraba el edificio, se podría recuperar hasta el 80% de los muros originales. Asimismo, también se buscó dotar de accesibilidad al interior con la creación de sendas escaleras que permiten que, a día de hoy, el interior del torreón sea un espacio visitable. Para culminar los trabajos, se colocó un alumbrado especial que hacen que el edificio resalte.
Las obras finalizaron en abril de 2019 y la puesta de largo del torreón recuperado tuvo lugar el día de Cornites con una jornada de puertas abiertas. Ahora, un año después, Hispania Nostra ha respaldado las labores de recuperación de esta atalaya que es un elemento inconfundible de la cima del Serantes, junto a su antena.
