Conectar las calles Dantzari y Askondo a través de un nuevo espacio, que en estos momentos se encuentra cerrado en ambos extremos con un patio interior degradado y que impide esa conexión entre ambas calles. Este es el proyecto que acometerá a corto plazo el Ayuntamiento de Iurreta con el propósito fundamental de regenerar y acondicionar la nueva calle dotándola de elementos que la hagan más atractiva para su uso, consiguiendo un espacio más de tránsito, mejorando la seguridad peatonal e incidiendo en la mejora general de la imagen de la zona. “Junto con ello se eliminará el espacio poco accesible y oscuro que se encuentra en Dantzari”, añadieron satisfechos desde el Consistorio iurretarra.

En lo que al proyecto se refiere, la superficie sobre la que se actúa son 135 metros cuadrados, teniendo una ligera pendiente descendente desde Askondo con una zona de rellano y nuevamente una pequeña zona ascendente hasta su encuentro con Dantzari para un total de 30 metros lineales.

El pavimento será de baldosa de granito gris claro con inserciones de gris oscuro. La zona peatonal quedara iluminada con cuatro báculos verticales de alumbrado led y posteriormente se realizara una intervención muralista como se ha realizado en el resto de las calles de Dantzari. “En estos momentos el suelo se encuentra en un espacio de futuro desarrollo urbanístico por lo que se ha llegado a un convenio con su propietario para su cesión gratuita en tanto no se desarrolle el mismo”, puntualizaron fuentes municipales.

Economia circular

Por otra parte, el proyecto contempla otro reto que se llevará a cabo en colaboración con el centro tecnológico Azterlan, como es la aplicación de un mortero piloto con arena de fundición. Sobre la superficie de 135 metros cuadrados en la apertura de la nueva calle, se trata de un proyecto experimental diseñado en el marco del proyecto Eraimat basado en la valorización de las arenas de fundición.

Este proyecto de investigación industrial está orientado al desarrollo de materiales de construcción a partir de la valorización de la arena de sílice residual generada en los procesos de fundición dando así respuesta a la necesidad de avanzar hacia el vertido cero y la economía circular.

La aplicación de estos prototipos en la obra de conexión de Dantzari y Askondo tiene por objeto realizar la demostración técnica real y la durabilidad de los mismos.

Con un presupuesto que ascenderá a los 47.000 euros, desde el Ayuntamiento de la anteiglesia prevén que el proyecto pueda ejecutarse a lo largo del próximo mes de octubre.