Bilbao ha dado un paso más para que el peatón sea el protagonista de la movilidad de la ciudad al adherirse a la Red de Ciudades que caminan. Esta decisión implicará que el Ayuntamiento deberá tener en cuenta entre sus principios estratégicos incrementar la movilidad integral, diseñar y gestionar espacios y lugares para las personas, reducir el peligro de atropellos y desarrollar una cultura del caminar. Esta iniciativa ha contado con el apoyo de todos los grupos aunque el PP se ha abstenido.

El concejal de Movilidad y Sostenibilidad, Alfonso Gil, ha afirmado esta red "no es una red radical en favor de los peatones, sino una red que plantea las cosas con mucho sentido común". En ese sentido, ha dicho se ha visto la necesidad de "compartir buenas prácticas con el conjunto de ciudades que están adheridas a la red".

La adhesión a la red de ciudades que caminan implica asumir, entre otros compromisos, "la movilidad de base peatonal, derecho al espacio público, planificación urbanística caminable, diseño urbano caminable, seguridad vial con enfoque peatonal, alianza entre medios sostenibles, visión global, ciudad inclusiva, autonomía infantil y medio ambiente urbano y saludable".

En la "Carta Internacional del caminar", que el Ayuntamiento tiene intención de ratificar, se ensalzan los beneficios de andar, como "un indicador clave de sociedades con salud, eficiencia, inclusión social y sostenibilidad".

Se reconocen, además, "los derechos universales de las personas en poder caminar de forma segura y a disfrutar de una alta calidad de espacios públicos en cualquier sitio y en cualquier momento".

También se asume el compromiso con el trabajo de "reducción de barreras físicas, sociales e institucionales que limitan la actividad de caminar".

REDUCIR EL RIESGO DE ATROPELLOS

Los principios estratégicos son "incrementar la movilidad integral, diseñar y gestionar espacios y lugares para las personas, mejorar la integración de las redes peatonales, planeamiento especial y usos del suelo en apoyo a la comunicación a pie, reducir el peligro de atropellos, mejorar la sensación y seguridad personal, aumentar el apoyo de las instituciones, y desarrollar una cultura del caminar".

El concejal de EH Bildu Bruno Zubizarreta ha mostrado su preocupación porque los principios de esta política movilidad " a menudo se deja en la mera teoría y desgraciadamente no se lleva a la práctica como muestran los innumerables ejemplos que tenemos en Bilbao: problemas de accesibilidad sin resolver en los barrios, urbanismo que a menudo mercantiliza el espacio público, etc". No obstante Zubizarreta ha asegurado que van a "seguir impulsando y aportando para que Bilbao sea inclusiva para el peatón y basado en un urbanismo humanista".

La portavoz de Elkarrekin Podemos, Ana Viñals, ha afirmado que "la prioridad es el peatón" y ha señalado que, "además de adherirnos a redes o participar en plataformas que trabajan temas de movilidad sostenible, es importante que esto vaya acompañado de medidas concretas, partidas presupuestarias y acciones que nos faciliten el que se puedan poner en marcha medidas concretas que son las que desde estas redes de trabajo a nivel teórico se plantean".

Desde el PP, su portavoz, Raquel González, ha afirmado que "adherirnos a esta red es muy goloso, porque el futuro va en esa dirección" y 'la Red de Ciudades que Caminan' está "llena de muy buenos propósitos y pretende hacer una ciudad más amable al peatón", algo con lo que el PP está "totalmente de acuerdo". Así mismo, ha apostado por "medidas proporcionales y que mantengan la convivencia con el coche, moto o bici o cualquier otro tipo de vehículo".