Bilbao - Diseñar y crear es su vía de escape. Por eso es un asiduo a los concursos de carteles. “Llevo unos ocho o diez años presentándome a los concursos de carteles de Carnaval y Aste Nagusia”, cuenta José Ángel Ligero, procedente de la localidad riojana de Alfaro, pero vecino de Nafarroa. Este año, su cartel Sardinita disfrazada lucirá desde el próximo día 28 hasta el 5 de marzo en las calles de Bilbao porque ayer se proclamó vencedor del certamen de carteles de Carnaval que organiza el Ayuntamiento de Bilbao. Hace dos años también saboreó la victoria en este mismo concurso. “Ha sido una alegría inmensa volver a ganar”, dice.
¿Qué le pasó por la cabeza cuando le comunicaron que era el ganador del concurso?
-Ha sido una alegría inmensa. Llevo cuatro años seguidos siendo finalista de este concurso y la verdad que intento no hacerme muchas ilusiones, aunque algunas siempre te haces. Prefiero no emocionarme mucho. Así que siempre pienso que sea lo que tenga que ser y si tiene que ser será. Pero, la alegría al ganar siempre es enorme. Por muchos premios que puedas obtener, cada galardón es algo muy especial, lo recibo como si fuera el primero. Es el significado de que tu creación ha llegado a gustar y es la imagen que va a anunciar un evento.
Sobre todo en un certamen como el de los Carnavales de Bilbao.
-Exactamente. A pesar de no ser de Bilbao quiero mucho esta ciudad. Además, los Carnavales de Bilbao son unos de los más importantes del Estado. Es una ciudad grande que da bastante importancia al cartel porque lo miman mucho todo. Le dan mucha importancia a todos los detalles, desde que empiezan hasta que queman la sardina.
¿Por qué este diseño?
-Si pienso en los Carnavales de Bilbao lo primero que me viene a la cabeza es la sardina porque creo que es uno de sus elementos más significativos. En su momento quise jugar con una composición que tuviese mucha fuerza junto a todo el colorido que le he dado a las sardinas. Creo que las sardinas hacen un juego de disfrazarse para ser una y he querido jugar con la luz que desprende la sardina junto al fondo negro. Eso tiene una razón ya que la mayoría de los carteles de los Carnavales siempre llevan muchísimo color y he querido buscar el contraste de la noche y el día.
¿Por qué así?
-Creo que cuando nos disfrazamos intentamos buscar lo contrario a lo que solemos ser. He querido jugar con esa conjunción incluso hacer que la sardina parezca que está ardiendo. Es una mezcla de todo: del color, de la oscuridad, de la conciencia e inconsciencia.
Desde que tuvo claro el diseño, ¿cuánto tiempo tardó en hacerlo?
-Varios días porque no lo hice de golpe. Lo fui haciendo poco a poco. Tenía clara la idea que quería plasmar aunque al principio pensé únicamente en dibujar una sardina. Después, al ir jugando poco a poco con las formas, creía que podía dar mucho más juego hacer varias sardinas para que pareciesen una en su conjunto. Tardé algunos ratitos durante una semana porque fui dándole vueltas cada vez que avanzaba un poco.
¿Qué es para usted el diseño?
-No me dedico a ello pero tengo claro que es algo más que un simple hobby. Es mi pasión, mi vía de escape, porque me gusta mucho crear y diseñar. Llevo ocho o diez años presentándome tanto al cartel de Carnaval de Bilbao y al de Aste Nagusia.
