El Ayuntamiento de Etxebarri aprovechará parte de su remanente para hacer frente a la crisis ocasionada por el coronavirus. Tal y como informaron ayer desde el equipo de gobierno, después de cerrar 2019 con un remanente de tesorería de casi 3 millones de euros, una parte de ese ahorro municipal irá a parar a las distintas necesidades que vayan surgiendo.

Etxebarri cerró el ejercicio contable 2019 con un superávit de 1.126.199 euros, lo que supone un remanente de tesorería de 2.984.294 euros. El alcalde, Loren Oliva, puso en valor que “la prudencia y la gestión responsable de estos años, nos permite contar con ese importante ahorro de casi 3 millones de euros. Esa cantidad nos va a hacer falta para sobrellevar la crisis poscoronavirus que nos obligará de nuevo a ajustar el presupuesto y probablemente ralentizar las inversiones en nuevos proyectos.”

Y es que el Consistorio hará una lectura de la situación y volverá a estudiar y ajustar el presupuesto actual. En base a los datos del remanente, “la legislatura se inicia con buen pie desde el punto de vista económico y con cierta solvencia”. En todo caso, “esta información coincide con la situación de crisis sanitaria provocada por el covid-19 y la incertidumbre económica que se generará tras la misma”.

La posible caída de ingresos provocaría que no se cumplan con las previsiones de crecimiento, “lo que traería consigo una devolución a la Diputación de parte de los ingresos correspondientes a 2020”. Por eso, el equipo de gobierno “apuesta por ser prudentes en el uso de ese remanente y realizar aquellas modificaciones del presupuesto que sean necesarias o para las que exista algún tipo de compromiso”. En ese sentido, el Ayuntamiento reestudiará y ajustará el presupuesto 2020 de cara a una más que previsible caída de los ingresos y entendiendo que serán necesarias varias medidas sociales y también destinadas al sector comercial y hostelero del municipio.

Sin embargo, todo el remanente no podrá ser destinado a esta situación de crisis ya que tal y como precisaron desde el Ayuntamiento de Etxebarri hay partidas que ya tienen un destino. “Es importante advertir que parte de ese remanente está comprometido en varios proyectos que se iniciaron ese año pero que se ejecutarán en 2020”, indicaron responsables municipales.

Se trata de actuaciones importantes que se incorporan al presupuesto 2020 y que se deben descontar del remanente. Por ejemplo destacan parte de las urbanizaciones de la calle Santa Marina y Egetiaga Uribarri, la cubierta de parte del patio de juegos del colegio infantil Barandiaran-Kukullaga o el aparcamiento de la avenida San Antonio. Se trata de obras y proyectos que están en marcha o de las que ya se han iniciado los trámites administrativos.

Por otra parte, señalaron que “cumpliendo nuestro compromiso con la transparencia, en la página web y en Hirix ya se encuentra publicada información detallada sobre la liquidación del presupuesto. Además, se puede consultar el plan de gestión 2020, los presupuestos aprobados y las liquidaciones de los ejercicios anteriores”.

Precisamente, entre las medidas que pretende poner en marcha el Ayuntamiento, ya está confirmado que, de ese remanente, 242.000 euros se dedicarán a un primer paquete de ayudas dirigidas a la ciudadanía en general, comercios y servicios hosteleros. Según detalló Oliva, está bastante adelantado “y esperamos que puedan materializarse cuanto antes”, con la intención de que puedan ser ayudas directas y que no se dilaten en el tiempo. En este sentido, en el pleno de este mes se debatirá una modificación presupuestaria con un primer paquete de medidas de cara a ayudar a personas y familias en situación vulnerable, comercios cerrados y hostelería.

Presupuesto. Según adelantaron desde el Ayuntamiento, Etxebarri volverá a estudiar las cuentas municipales por si hubiera que introducir algunos cambios de cara a hacer frente a la crisis creada por el coronavirus. Asimismo, aprovechará que hay un remanente disponible cercano a los 3 millones de euros para poner en marcha medidas.