Cuando el clima fiscal acompaña las administraciones públicas tienen motivo para sonreír. Los presupuestos en curso cuadran y los del ejercicio siguiente tienen una base sólida para alimentar las necesidades de cada municipio. Es lo que acaban de certificar la Diputación foral de Bizkaia y los ayuntamientos en la reunión del Consejo Territorial de Finanzas.
Una cita que se afrontaba sin sobresaltos y que se ha saldado con la previsión de inyectar recursos económicos extra a los Ayuntamientos. A falta del cierre final del ejercicio en febrero, serían 27 millones de euros adicionales, lo que supone un incremento del 2,4%.
Al contrario que el año pasado, cuando los pagos a los mutualistas jubilados, desequilibraron los cálculos de recaudación de Hacienda y los consistorios tuvieron que devolver 41 millones de euros a la Diputación.
Presupuestos 2026
El saldo a favor de los municipios es la consecuencia inmediata de la reunión de esta mañana. Pero también se ha fijado el reparto de cara al próximo año, 1.206,7 millones, un 6,7% más. La cifra más importante porque los ayuntamientos ya pueden empezar a elaborar sus cuentas públicas con la base del dinero que se les ha asignado.
El fondo común que gestiona esos recursos, Udalkutxa, asigna cada año una cifra fija a cada municipio, en torno a 81.000 euros, y otras variables en función de los habitantes, las unidades escolares, el nivel de paro, la dispersión de la población o (en caso de las las localidades costeras) su superficie de playa, que es de uso público para todos los vizcainos.
Prudencia
A pesar del buen momento que atraviesan las arcas públicas del conjunto de Bizkaia, los representantes de la Diputación Foral y de los municipios de Bizkaia han compartido en este foro la necesidad de apelar, en todo caso, a la prudencia y a la responsabilidad en la gestión presupuestaria, así como a la necesidad de continuar garantizando la sostenibilidad financiera de las instituciones municipales.
