Los casos en los que los bomberos de Bizkaia ya no cobrarán por el servicio
El servicio foral actualiza su normativa para adaptarse a la realidad operativa y social
Ni por rescates de personas o animales, ni por incendios, ni por intervenciones en los que haya víctimas mortales. El servicio de bomberos de Bizkaiaha actualizado su normativa para adaptarse a la realidad operativa y social, lo que, a efectos prácticos, supone que ya no se cobrarán tasas por determinadas actuaciones que, hasta ahora, sí suponían un desembolso para el ciudadano. ¿Ejemplos? Los 92 euros que había que pagar por incendios en viviendas, los 69 por aperturas de vivienda aunque hubiera una persona en peligro en el interior o los 145 euros por el rescate de un animal.
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El Consejo de Gobierno de la Diputación de Bizkaia ha aprobado este jueves la propuesta de una nueva norma foral -que aún tiene que recibir el visto bueno de las Juntas Generales para su aplicación- que regula las tasas a aplicar en las actuaciones del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento. La normativa vigente data de 1990, con una última revisión en 2013, por lo que se encontraba "claramente desactualizada" en relación al contexto y el tipo de intervenciones en los que actúan los bomberos. "Hoy se actúa con mayor frecuencia, en escenarios más diversos y con medios más sofisticados", ha destacado la portavoz foral, Leixuri Arrizabalaga. Urgía por ello una revisión de los precios públicos.
Por todo ello, se ha establecido un método de cálculo "más simple y objetivo" para las tasas, "definiendo con claridad qué se cobra, cuándo y a quién" en base al tiempo real de intervención y los recursos que han sido necesarios. No se tendrá en cuenta, por ejemplo, dónde ocurra el incidente, lo que "evita diferencias entre zonas rurales y urbanas".
Salvo negliencias graves
La nueva normativa elimina el cobro de muchas de las actuaciones que afectan al día a día de los ciudadanos, y también aquellas en las que se encuentran en peligro. A partir de su aprobación definitiva, el servicio no cobrará los rescates de personas o animales, la extinción de incendios en viviendas, las actuaciones ante intentos de suicidio, la retirada de animales o las intervenciones en las que haya víctimas mortales. "Estas actuaciones representan una parte importante de las cerca de 7.000 salidas anuales del servicio y quedarán libres de tasa", ha apuntado Arrizabalaga, salvo en casos de negliencia grave. El objetivo es claro: "no añadir una carga económica a situaciones ya de por sí traumáticas para la ciudadanía".
Eso sí, habrá casos en los que se seguirá girando factura. ¿Cuáles? Las intervenciones que no supongan un riesgo vital o que reporten un beneficio para empresas que deben tener cubiertos estos riesgos, como incendios en instalaciones industriales, accidentes de tráfico, fugas en cualquier tipo de instalaciones o vertido de sustancias peligrosas. "Este enfoque permite reforzar la sostenibilidad del sistema sin penalizar a la ciudadanía, y promueve una mayor corresponsabilidad por parte de quienes generan determinadas intervenciones o disponen de coberturas aseguradoras", ha subrayado Arrizabalaga.
188.000 euros cobrados en 2024
La recaudación por estas tasas representa un porcentaje "muy reducido" del coste total de servicio de bomberos, un 0,5% de los 37,6 millones de presupuesto, lo que supone, en cifras redondas, que el año pasado se cobró por estas actuaciones 188.000 euros. Con esta nueva normativa "no se espera un incremento sustancial de ingresos, sino una mejor racionalización del uso de los recursos públicos y una adecuación a la realidad económica actual".
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