Balmaseda busca costaleros para las procesiones

De los que procesionarán el jueves desde las 19.00 horas no hay costaleros “para el Nazareno, el Azote y, San Juan y el de Cristo con la Cruz, que es más reciente, tiene ruedas, y al Ecce Homo se le han puesto”. Incluso para los que cuentan con efectivos suficientes, como el Cristo del Cementerio o la Virgen Dolorosa, “nos hemos encontrado con muchas dificultades”. El Viernes Santo a la misma hora a estos se unirán en la procesión del entierro –con participación de algunos personajes de la Pasión Viviente– la Piedad, el Descendimiento, que funciona a ruedas, y la urna funeraria que, aunque dispone de ellas, necesita “dos personas para que una de ellas, encargada de guiar a la otra”. En ambos casos, saldrán desde la plaza de San Severino recorriendo las calles Correría y Martín Mendía para regresar al punto de partida. Ya el año pasado “no sacamos el Azote ni San Juan”.

Instalar ruedas

“Los tiempos han cambiado”, reflexiona Pilar. La costumbre de viajar más en estas fechas, así como la progresiva desafección hacia las costumbres religiosas repercuten en este tipo de celebraciones al mismo tiempo que Balmaseda se implica en su célebre Vía Crucis Viviente. “Un día pregunté a un grupo de chavales que participan si no les gustaría sacar los pasos y me respondieron que ven un sentido religioso”, al contrario que la representación. Por todo ello, “el futuro apunta a que habrá que colocar más ruedas”.