Tras ganar cuatro medallas, tres en Barcelona 92 y una en Atlanta 96, en la modalidad de natación paralímpica, Sonia Guirado supo que nada podía pararla bajo el agua. Sin embargo, sobre el asfalto, la cosa se complicó. Con un 92% de discapacidad, 1,13 cm de altura y sin la mitad de los brazos, Guirado confiesa que nunca pensó en todas las complicaciones y trabas que se iba a encontrar a la hora de sacarse el carnet de conducir. Y es que, para hacerse con él ha tenido que desplazarse hasta Bizkaia, ya que es en Basauri el único lugar donde pueden realizarle al coche las adaptaciones necesarias. lo que supone un aumento considerable de los costes. Por ello, ha puesto en marcha una campaña de crowdfunding donde pide 80.000 euros.

"Necesito poder moverme con libertad e independencia, en el asfalto. Nunca me plantee algo así cuando empecé mi aventura de conducir", lamenta que exista "muy poco transporte público adaptado”. Por ello y porque quiere sentirse "libre" para "escoger ir a un lugar o a otro". “Para poder seguir el día a día de mi hijo con las extraescolares tengo que ir en taxi porque en transporte público tampoco puedo”, indica. "A pesar de lo que pueda parecer, tengo una vida muy normalizada; soy madre, trabajo, tengo pareja, familia, amigos, ilusiones y objetivos. Pero, obviamente, también tengo limitaciones en cuanto a autonomía", relata. Y confiesa que sus limitaciones "se suplen con dinero". 

Las adaptaciones cuestan cerca de 90.000 euros

Es de Barcelona, pero cuenta que "tanto la teórica, las prácticas, los exámenes, como la adaptación, se realiza, únicamente en Bilbao". Lo que supone tener que pasar en la capital vizcaina un total de 6 semanas. Esto hace que los costes aumenten. “El carnet de una persona puede costar 3.000 euros yéndome por lo alto y en mi caso son más de 80.000 euros”. Ya ha aprobado el examen teórico y otra prueba que tienen que realizar las personas con discapacidad en la que un examinador de la DGT ha determinado que no solo es segura para ella misma sino que también lo es para los demás a la hora de circular, solo le queda por hacer la prueba práctica del examen de conducción para la que ya lleva tres días de clases intensivas mañana y tarde, con una media de cinco o seis horas diarias.

Guirado detalla el dinero a desembolsar: "Para que os hagáis a la idea, solo una parte de las adaptaciones que necesito cuesta 46.000 euros. El coche de segunda mano, la autoescuela adaptada, el resto adaptación coche, los desplazamientos, el alojamiento, las comidas, etc, ronda los 90.000 euros". Y cuenta, que la prestación que otorga el Gobierno español es, como máximo, de 3.000 euros. Es en la autoescuela Irrintzi de Basauri donde han realizado las adaptaciones de su coche y a través de la cual va a conseguir su carnet de conducir. "Quiero agradecerles su trato humano", indica.

Por ello, ha puesto en marcha una campaña de crowdfunding a través de la página Gofundme.com para recaudar fondos para poder sacarse el carnet. En 'Conducir es ganar. Ganar autonomía, libertad...' pide llegar a los 80.000 euros para poder llegar a ser libre e independiente también, sobre un coche. Por el momento, ha recibido 19 donativos que suman 2.345 euros.