Renfe ha instalado sistemas inteligentes de videovigilancia en estaciones de Cercanías de Bizkaia y Gipuzkoa, un sistema que permitirá recopilar y procesar “de forma anónima y automatizada miles de datos”, según informó la compañía.

De este modo, los equipos están ya instalados en las estaciones vizcainas de Portugalete, Santurtzi, Ametzola, Autonomía, Lutxana, Miribilla, San Mamés, Zabalburu y Zorrotza en la línea de C1; Galindo, Gallarta, Putxeta, Trápaga-Galindo, Urioste, Muskiz, Ortuella, Sagrada Familia y Valle Trápaga en la línea C2, y las estaciones de Amurrio, Amurrio-Iparrralde, Areta, Arrigorriaga, Dos Caminos-Basauri (Bidebieta), La Peña de Bilbao, Llodio, Luiaondo, Miraballes (Ugao), Ollargan, Orduña y Santa Cruz de Llodio.

En el caso de Gipuzkoa, se han instalado los primeros equipos en las estaciones de Gros, Hernani Centro, Lezo-Renteria y Tolosa. En una segunda fase, se implantará en las estaciones de Andoain, Beasain, Herrera y Ordizia.

La actuación consiste en la digitalización de los sistemas de seguridad de 600 estaciones de Cercanías de todo el Estado, un proyecto denominado Renfe Smart Security Station (RS3) en cuya primera fase, que finalizará este 2024, se equiparán 415 instalaciones. Este proyecto se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea NextGenerationUE.

Para este año, Renfe tiene prevista la licitación de una segunda fase del proyecto RS3 para poner en funcionamiento 185 instalaciones más y que culminará a mediados de 2026. Este proyecto también estará financiado con fondos de la Unión Europea. Este nuevo sistema recopila y procesa de forma anónima y automatizada miles de datos a través del sistema CCTV de cada estación y los integra en un cuadro de mando único. El objetivo es mejorar la seguridad y la experiencia del cliente.

El proyecto ‘Renfe Smart Security Station’ (RS3), que cuenta con un presupuesto de 31,7 millones de euros y que ha sido financiado con fondos de la Unión Europea, comenzó a finales de 2021 y finalizará a mediados del año 2026.

Durante este tiempo se sustituirán más de 7.000 cámaras de seguridad analógicas por cámaras IP, que permitirán compartir la información recogida a través del sistema CCTV en un sistema de videoanalítica integrado.

Asimismo, el proyecto RS3 prevé la instalación de más de 685 servidores de última generación y la renovación de sistemas operativos, instalaciones y elementos digitales de las estaciones de Cercanías. También prevé la instalación de aproximadamente 500 sondas de ciberseguridad para su monitorización, control y análisis. El objetivo final es aumentar los niveles de seguridad digital y de ciberseguridad. Gracias a este sistema inteligente de seguridad se podrá conocer lo que está pasando en las estaciones de Renfe Cercanías en tiempo real.