Uno a uno, representantes de las 22 entidades deportivas de la localidad de Arrigorriaga pasaron, la tarde del viernes, por el escenario de Lonbo Aretoa para recoger una más que merecida placa conmemorativa en reconocimiento a su trabajo y su labor y el aplauso del público allí congregado. Fue el inicio de la primera edición de Kirolariak plazara!, una novedosa iniciativa con la que el consistorio pretende poner en valor la trayectoria de clubes y deportistas del municipio y de las personas “que lleváis años, lustros e incluso décadas haciendo un trabajo a favor de la comunidad ofreciendo una alternativa saludable y basada en valores tanto a niñas y niños, como a jóvenes y personas adultas”, resaltó la alcaldesa, Maite Ibarra, en la presentación del acto.
Y antes de dar paso a los premiados de este año, elegidos a través de propuestas ciudadanas y de la posterior votación popular, hubo también espacio para el recuerdo y para homenajes. Es el caso de Jesús Luengo, que llegó a la localidad procedente de Barcelona con el objetivo y la ilusión de fundar un club de tenis y lo logró hace ya 11 años, pero tristemente falleció en 2019. Y también hubo un especial agradecimiento a la figura de Juan Carlos Muñoz Oregi “por el trabajo que ha hecho todos estos años como director del polideportivo y estoy segura de que muchos de los que están aquí han sido testigos de su buen carácter, de su paciencia, de su predisposición y de su gran capacidad de trabajo”, alabó Ibarra.
Cinco premiados
La gala continuó, después, con el turno de los protagonistas de la noche: los premios otorgados por el propio pueblo de Arrigorriaga. El club Padura de Baloncesto fue el designado por el Ayuntamiento en la modalidad dirigida a reconocer la apuesta por la presencia del euskera en el deporte. En la categoría de Mujer Deportista, el reconocimiento fue para la joven campeona de taekwondo Andrea Barona que declaró sentirse “muy contenta, no me lo esperaba y, por supuesto, estoy muy agradecida a todos”. En la modalidad de Trayectoria Deportiva Individual el galardón recayó en Mikel Rico, ex jugador del Athletic que a los 38 años todavía sigue en la elite del fútbol en las filas del Cartagena en Segunda División y que, debido a sus compromisos profesionales, no pudo estar presente en el acto. Aún así, a través de un vídeo lanzó un mensaje a sus convecinos. “Me hubiera encantado estar ahí en persona, pero no ha sido posible. Y la verdad, cuando estás tan cerca de poner fin a tu carrera deportiva, que alguien piense en ti y te premie por ello es de agradecer y te hace recordar todo”, declaró para después asegurar que “para mí ha sido un placer defender la camiseta de todos los clubes por los que he pasado y que en su día apostaron por mí, pero para un vizcaino lo más especial es haber podido jugar en el Athletic Club durante 6 años”.
El premio a la Trayectoria Deportiva de Equipo recayó en el club Garriko que lleva más de 20 años promocionando el taekwondo en Arrigorriaga y que, en la actualidad, tiene en torno a 50 personas aprendiendo y practicando esta disciplina de artes marciales, mientras que el galardón Zu Nagusi que reconoce el tesón y el pundonor de las personas mayores fue para Joseba Urrutikoetxea, paradigma de multideportista de 60 años que comenzó su andadura en el mountanbike y que alterna las dos ruedas con carreras populares a pie como la Santurce a Bilbao, la Herri Krossa de Bilbao o la mítica Behobia-San Sebastián y que también ha participado en duatlones. “No soy un profesional de esto. Lo he hecho, siempre, porque me gusta. Mi aita fue el que me inculcó estos valores, los he seguido y quiero agradecer a los clubes donde he estado que hayan confiado en mí”.
Aplausos para los pioneros
Y muy especial y emotivo fue el espacio dedicado en la gala para homenajear a tres pioneros del deporte en Arrigorriaga. La primera en subir al escenario fue Maruja Torres que hace más de 40 años, y ya con cuatro hijos, aceptó el reto de ponerse los pantalones cortos y empezar a practicar fútbol en un equipo local, Adiskideak, fundado por ella y otras compañeras en 1982 y que fue el primero federado junto al Sondika. “Fue difícil, muy difícil. Ahora está bien visto que haya chicas entrenando y jugando al fútbol, pero entonces no lo era. Con ganas pudimos. Fuimos perseverantes, luchadoras, no nos dimos por vencidas y lo conseguimos”.
Muy conocido también es en Arrigorriaga Jose Mari Zaballa, de 84 años, por su faceta como jugador y su vocación de entrenador de fútbol durante más de medio siglo y, sobre todo, porque fue fundador del Etorki junto a Javi Ibarrondo. En su lugar, tomó la palabra su nieto en una cariñosa intervención en la que aprovechó para dar las “gracias al Ayuntamiento y al pueblo de Arrigorriaga por este reconocimiento que no solo es para él sino, también, para todas las personas que le han estado ayudando en todos estos años”. Y es que han sido muchas décadas y muchas temporadas “trabajando sin descanso y de manera altruista, formando a niños y niñas en el fútbol y su salario ha sido el cariño y el reconocimiento de la gente”, añadió.
Y, por último, llegó el turno de José Miguel Nieva, nacido en Miranda de Ebro en 1949 para después trasladarse a vivir a Arrigorriaga con sus padres. En edad juvenil se incorporó al Padura de Baloncesto y desde entonces hasta su retirada, jugó más de 20 temporadas en el club local. Su trayectoria no acabó ahí ya que también ha sido entrenador más de 25 temporadas y ha ocupado diferentes cargos y funciones en la directiva. A su juicio, “el club se encuentra, en estos momentos, en la mejor etapa de su historia, ha crecido mucho y un paso muy importante se dio hace algo más de 20 temporadas con la incorporación del baloncesto femenino. Y el futuro me parece que es bueno y prometedor”, aseguró ante los asistentes.
