Harrera Herria de Atxondo vuelve a reclamar un hogar para los migrantes de Axpe

La propuesta llegó tras la reunión conjunta mantenida hace dos semanas con el director de Migración del Gobierno vasco, Xabier Legarreta, representantes de Harrera, concejales de EH Bildu y las personas que hasta hace unas semanas residían en el albergue municipal, cerrado temporalmente por su mal estado de conservación. “El Ayuntamiento nos dijo que nos iba a entregar las llaves de la casa de emergencia social de Arrazola, pero lo han ido retrasando porque no tiene la luz dada de alta y seguimos igual. Esta era una medida provisional y hemos estado esperando también a un informe de la Secretaria municipal para ver si nos permite volver al albergue de Axpe, pero el Ayuntamiento no ha cumplido ninguno de los compromisos acordados en la reunión. Por eso volvemos a salir a la calle”, lamentaron desde Harrera Herria.

Ante esta situación, desde el pasado martes integrantes de la plataforma han vuelto a instalar el campamento de protesta con dos literas, sofás, fotografías reivindicativas y un cartel en el que puede leerse: Harrera hutsik eta kalean. “Tocaremos cualquier puerta que haga falta. Iremos a Vitoria, hablaremos con el Ararteko y seguimos tendiendo la mano al Ayuntamiento para buscar una solución a esta complicada situación”, defendieron desde la entidad.

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Atxondo, responsables municipales quisieron aclarar ayer miércoles que “desde el día siguiente a la reunión que se mantuvo con Harrera Herria se han intentado agilizar todos los trámites necesarios para poder hacerles entrega de las llaves de la casa de Arrazola. Estamos en continuo contacto con la empresa suministradora con el objetivo prioritario de agilizar al máximo los plazos, pero no está en nuestras manos y seguimos a la espera de que atiendan la petición”.

Problemas de insalubridad

Fue el pasado mes de septiembre cuando la administración local de Atxondo encargó un informe, después de que, a finales de verano, gracias a una inspección técnica, se detectaran problemas de insalubridad en el albergue de Axpe, donde en ese momento se encontraban las niñas y niños saharauis.

Durante muchos años se llevaron a cabo actuaciones puntuales que no fueron suficientes para seguir manteniendo el edificio en condiciones habitables. Según el informe era necesaria una inversión aproximada de 500.000 euros para adecuar la infraestructura a las necesidades actuales; montante económico muy elevado para la administración local. Por ello, y ante la precaria situación en la que se encontraba el inmueble, el Ayuntamiento de Atxondo decidió, siempre salvaguardando la seguridad de las personas que lo habitan, mantener cerrado el edificio tal y como se les notificó a las personas y agrupaciones que hacían uso del espacio. “Desde el Ayuntamiento de Atxondo hemos velado en todo momento por la seguridad de las personas por encima de cualquier interés personal o colectivo”, recalcaron fuentes municipales.