Una muestra más de que los usuarios de Argia Fundazioa no entienden de límites o fronteras –las zancadillas se las suelen poner desde fuera, de hecho–, es que se han lanzado a exponer los cuadros que ellos mismos han pintado. Miembros de esta entidad que lleva más de treinta años acompañando a personas que viven bajo un diagnóstico de enfermedad mental darán a conocer sus acuarelas en el mercado de Algorta, desde el próximo día 3 de octubre al 28.

“Disfruto pintando”, “me siento bien creando”, “me quedo a gusto con el trabajo”, “el resultado final es la transformación”, “me aporta bienestar”, “es mi identidad”, “disfrutamos aprendiendo”... Son algunas de las frases con las que el colectivo de acuarelistas de Argia Fundazioa quiere enmarcar esta exposición de cuadros que atesoran una gran belleza. En efecto, la pintura no es algo nuevo para esta organización tan activa como reivindicativa. “Hace ya varios meses, una de las personas del colectivo de acuarelistas de Argia Fundazioa trajo la idea de poder realizar una exposición en alguno de los espacios de Getxo, ya que llevaba tiempo aprendiendo diferentes técnicas de dibujo en otro centro y comenzó, en el hospital de día que tiene Argia Fundazioa en Algorta, un taller para aprender más sobre esta técnica de la acuarela. Además, con anterioridad ya había expuesto y creía que esta era una muy buena manera de acercarse al municipio y visibilizar las capacidades de las personas de este colectivo”, explican desde la asociación getxotarra. Ese fue el germen de esta exposición que se verá en el mercado de Algorta, que, además, llegará con otra iniciativa: el jueves 20 tendrá lugar una charla en el aula de cultura de Villamonte donde una serie de personas de Argia Fundazioa hablarán sobre su camino de recuperación, cuidados de la salud mental y su lucha contra los estigmas asociados a esta enfermedad.

Luis Mari Arana, por ejemplo, ya ha contado en las páginas de este periódico su experiencia. “Nosotros luchamos por que la sociedad nos quite el estigma, pero también por que desaparezcan todos los otros estigmas, como el que puede haber hacia las mujeres, porque al estar estigmatizados, entendemos a los otros colectivos. Yo tengo esa empatía, porque a mí me gusta que la tengan conmigo”, reflexionaba. En este sentido, desde Argia impulsan actividades y programas, como Ale Hop, conferencias que dan las propias personas con diagnóstico de enfermedad mental. “Vamos a la uni, a colegios de Erandio... Vamos y contamos nuestra historia. Así ellos ven que somos personas como las demás y que lo que dicen los medios de comunicación, a veces, no digo que sea mentira, sino que no es todo el colectivo así; es un tanto por ciento pequeño”, reconoce Luis Mari.