ONDARROA. Pese a que no dejaron escrito ningún mensaje, el acto ha sido interpretado por el Consistorio y la familia como una reacción de odio hacia las personas transexuales, según ha dicho hoy a Efe un portavoz municipal.

El joven Ekai Lersundi se quitó la vida cuando estaba en espera de recibir tratamiento hormonal en la Unidad de Género del Hospital de Cruces.

El Consistorio de Ondarroa ha condenado con contundencia estos hechos, ha expresado de nuevo su apoyo a la familia de joven y ha dicho que continuará trabajando en favor de la igualdad y contra la discriminación.