Bilbao - “La historia la escriben otros cuando puedes hacerlo tú”. Goio Bañales predica con el ejemplo. Licenciado en Bellas Artes y profesor de dibujo en el instituto de Gallarta, ha publicado una docena de libros sobre Enkarterri y Ezkerraldea, el último, una introducción de nada menos que 700 páginas al mundo naval del valle de Somorrostro y alrededores. Dar forma a este trabajo, que es el hilo conductor de la exposición sobre la misma temática que acoge el Museo de las Encartaciones hasta noviembre, le ha llevado dos años, pero el proceso de documentación para completar In insula maris va mucho más allá. “He incluido material que encontré incluso hace dos décadas”, reveló antes de desgranar sus claves durante una conferencia en la sede de las Juntas Generales.

Ya desde su época universitaria le gustaba acercarse a la historia para comprender mejor el contexto social que rodeaba a las obras que abordaban en la carrera. Algo que le ayudaría al trabajar como ilustrador en varios medios de comunicación. Trazaba itinerarios por Bizkaia dibujando los lugares de interés y completándolo con información que él mismo buscaba. También formó parte “del primer fanzine de Euskadi, donde coincidí con Álex de la Iglesia”, recordó. Aprobar las oposiciones de profesor acarreó una mudanza a Gipuzkoa que le hizo bajar el ritmo, aunque nunca abandonó su inquietud investigadora.

Al pasado más cercano llegó rastreando sus orígenes. “Mi familia procede de Enkarterri. Mis abuelos me contaban historias de la mina y me gustaba buscar más”, contó. No siempre encontraba lo que quería, pero “sí otras cuestiones también interesantes”. Hasta que empezó a manejar tal volumen de datos que pensó en plasmarlos en un libro. El primero trató sobre los mayorazgos en Portugalete, al que siguió otros relativo a Barakaldo. Y a partir de ahí “una cosa condujo a otra: me llamaron del Ayuntamiento de Barakaldo y la Diputación Foral de Bizkaia”. En esa época conoció a Javier Barrio, actual director del Museo de las Encartaciones, situado en la Casa de Juntas de Abellaneda, en Sopuerta. Fruto de su colaboración con la pinacoteca encartada se editó en 2011 un libro sobre Francisco de Garay. Goio Bañales sacó a la luz la apasionante vida de este navegante nacido en Sopuerta en el siglo XVI poco conocido a pesar de que viajó a América con Cristóbal Colón y fue nombrado gobernador de Jamaica por el rey Fernando el Católico.

“Yo soy el primer sorprendido cuando me topo con personajes de esta talla”, confesó. Y es que en su opinión nos remontamos como mucho a las Guerras Carlistas y lo que queda más lejano está en una especie de nebulosa”. Sus libros y muestras como la del Museo de las Encartaciones despejan ese panorama con iniciativas que sacan la cultura a la calle. Por ejemplo, la ruta por Muskiz el 25 de abril relacionada también con la muestra sobre el mundo naval. “Intentamos organizar actividades para que sea una exposición dinámica”, señaló el director del museo, Javier Barrio.

La labor de documentación que se esconde tras el libro que la inspira bien lo merece. La opción de consultar por Internet aquellos archivos históricos que se han digitalizado ahorra viajes, pero no resta minuciosidad ni rigor. “Tengo por norma no fiarme de lo que escriben otros y en mis libros siempre incluyo referencias que yo he consultado por si los lectores quieren profundizar en la materia”, expuso. Él prefiere acudir directamente a las fuentes, como el archivo eclesiástico. “Copié los nombres de vecinos de Somorrosotro y alrededores y empecé a indagar a partir de coincidencias en apellidos”, describió.

“Hay material, aunque no investigadores porque profesionalizarse en el mundo de la historia es complicado”, admitió Javier Barrio. Goio Bañales compagina esta afición con su trabajo como docente y su otra pasión: el dibujo. “¡Menos mal que se inventó el ordenador! Ayuda a poner en orden los apuntes”, celebró. Información le sobra para seguir desempolvando el legado de Enkarterri, Ezkerraldea y Meatzaldea.