Con las elecciones municipales y forales a la vuelta de la esquina -falta exactamente un mes para ese domingo 28 de mayo-, una de las principales preocupaciones de los ciudadanos, urnas a un lado, es si tendrán que pasar ese día sentados en una de las miles de mesas electorales que se habilitarán en Bizkaia. Bilbao ya ha deshojado la margarita; este viernes por la mañana, en un pleno extraordinario, el Ayuntamiento ha celebrado el sorteo para designar a los presidentes y vocales - titulares y suplentes- de las mesas electorales.
En el sorteo han entrado todos los bilbainos menores de 70 años -los mayores de 65 años pueden renunciar voluntariamente- que sepan leer y escribir; el presidente, además, debe tener al menos el título de Graduado Escolar. Cada mesa está compuesta por un presidente y dos vocales, así como sus dos suplentes correspondientes.
Una vez celebrado el sorteo, los designados empezarán a recibir sus cartas en tres días. Bilbao lo ha celebrado este viernes, pero los ayuntamientos tienen hasta el 3 de mayo para hacerlo.
Una vez recibida la notificación, los ciudadanos tienen siete días para presentar alegaciones ante las Juntas Electorales de su zona, sobre las causas que les impiden ser miembros de la mesa electoral. Pueden ser relevados de ese puesto, entre otros, las personas con discapacidad, las mujeres a partir del sexto mes de embarazo, la víctima de un delito cuando el acusado o condenado tenga una prohibición de aproximación y pertenezca a la misma mesa, las personas que ya han sido miembros de la mesa al menos tres veces en los últimos diez años, las que estén de baja laboral o los religiosos de clausura.
La resolución de las alegaciones se notificarán cinco días después.
