El Ayuntamiento de Bilbao encara su último curso político antes de las elecciones municipales de 2023 con "optimismo" frente a la incertidumbre económica de este próximo otoño. "No toca crispación y enfrentamiento, toca trabajo y acciones por el bienestar de bilbainos y bilbainas. El paro ha descendido pero sigue preocupando el poder adquisitivo de las familias, la posibilidad de acceder a una vivienda, las mejoras sociales y urbanísticas de los barrios para tener una ciudad más cohesionada y amigable...", ha vuelto a reiterar su apuesta por el acuerdo el alcalde, Juan Mari Aburto, en el pleno de política general que se celebra en estos momentos en el Ayuntamiento.

En el último pleno del Estado de la Villa de esta legislatura, el alcalde ha recordado que, a pesar de que este 2022 se presentaba como el año de la superación de la pandemia y sus consecuencia, en la actualidad se vislumbran "nubarrones en otoño", derivados de la inflación, la subida de los precios de materias primas o las dudas en el suministro de gas. "Hemos ido consiguiendo una lenta recuperación del empleo, en positivo, a lo largo de estos años pero a mí me sigue doliendo las familias con personas desempleadas o con trabajos precarios...", ha destacado Aburto. Por ello, ha subrayado que el objetivo es claro: "Tenemos que seguir reduciendo esas cifras. La sociedad bilbaina quiere pasar página a la pandemia pero está preocupada por el incremento del precio de las cosas del día a día, las que afectan a su vida cotidiana".

Por ello, ha avanzado que el equipo municipal está ya centrado en desarrollar proyectos que permitan superar esta etapa. "Tenemos una gran cartera de proyectos por hacer, acciones que comienzan ya a hacerse realidad o que lo serán en los próximos meses, y tenemos identificados retos de ciudad, y específicos por áreas, que vamos a afrontar antes de que se conviertan en problemas sin solución", ha explicado. "Estamos concienciados, trabajando ya en ello y seguros de que vamos a volver a conseguir hacer frente a cualquier situación adversa".

En ese sentido, ha advertido de que "Bilbao tiene que ser una ciudad competitiva, atractiva, cohesionada y con servicios públicos de calidad, y para eso necesitamos centrar nuestros esfuerzos en crear una ciudad competitiva para poder mantener, desarrollar y mejorar el bienestar de la ciudadanía".

Eso sí, ha mostrado su convicción de que, como los estragos de la pandemia, la capital vizcaina también superará esta etapa. "Soy optimista, por naturaleza. Frente a las incertidumbres, confío en Bilbao y su gente. Y confío en el compromiso de este Ayuntamiento para intentar frente a lo que pueda venir. Como alcalde, quiero transmitir confianza ante la incertidumbre; seguiremos ofreciendo estabilidad, credibilidad, esfuerzo, compromiso, medidas, seriedad en el gasto público, actuaciones y presupuestos públicos pensados por y para el bienestar de la ciudadanía, y por y para un Bilbao mejor y más sostenible", ha trasladado.

ACUERDOS CON LA OPOSICIÓN

Para todo ello, Juan Mari Aburto ha tendido la mano a los grupos de la oposición para que, según ha subrayado, la colaboración entre grupos políticos que se mantuvo durante la pandemia siga vigente hoy en día. "Estamos preocupados en la política de las cosas pequeñas, diarias, cercanas y no vamos a entrar en las peleas ni discusiones interesadas de las cosas de la política que no hacen más que poner palos en la rueda del avance de Bilbao", ha advertido.

Y es que, ha recordado, frente al "ruido político en otros puntos del Estado" Aburto ha destacado que el bilbaino ha sido el "único Ayuntamiento, al menos en Euskadi, donde los grupos políticos con responsabilidad municipal hemos hecho una piña a favor de la ciudadanía. Aparcando diferencias, con visión de ciudad; hemos sido un referente a la hora de acordar cuantas medidas estaban en nuestras manos para poder ayudar a los sectores más damnificados de la ciudad por el duro golpe de la crisis pandémica".

Tras agradecer esa disposición a las portavoces de todos los partidos políticos con representación municipal, ha abogado por mantener esa dinámica. "Sigamos así", ha animado. "Quiero escuchar también sus aportaciones y espero encontrarme con una voluntad de diálogo, consenso y acuerdo para esta recta final de mandato. Siempre me han visto con la mano tendida y sin ganas de polemizar y, en muchas ocasiones, la han recogido y han atendido y entendido lo que nos pide la ciudadanía. No toca crispación y enfrentamiento, toca trabajo y acciones por el bienestar de bilbainas y bilbainos", ha enfatizado.